El Embajador de Estados Unidos en México reconoció la responsabilidad de su país en el tráfico ilegal de armas hacia México, las cuales son adquiridas por grupos criminales, en la instalación de la nueva estrategia de seguridad binacional Entendimiento Bicentenario.
Ciudad de México, 14 de diciembre (SinEmbargo/EFE).– El Embajador estadounidense Ken Salazar reconoció que las armas que son utilizadas por el crimen organizado en México provienen de su país, esto durante la instalación del nuevo plan de seguridad binacional Entendimiento Bicentenario que sustituye la estrategia propuesta por la Iniciativa Mérida.
«Las armas que vienen de Estados Unidos a aquí, a México, es responsabilidad de las dos naciones, pero reconocemos, como lo ha dicho el Presidente Biden, que estas armas están viniendo de los Estados Unidos. Es nada más un ejemplo de la importancia de lo que se quiere hacer [con la nueva estrategia]», remarcó el diplomático.
La declaración se da en el contexto de la inédita demanda que interpuso en agosto la Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana a los fabricantes estadounidenses de armas, con la que se busca obtener una indemnización por presuntas prácticas comerciales negligentes. El Gobierno de México acusó a 11 empresas de negligencia por facilitar el tráfico ilícito y detonar así la violencia en el país.
Se crearon cinco mesas de trabajo, las cuales se enfocarán en la protección de la ciudadanía y el combate a la violencia, la prevención de crímenes transfronterizos, la persecución de redes criminales, la coordinación de las secretarías de la Defensa Nacional y la Marina, y un Comité Binacional de Cooperación.
«Estamos en un momento transformativo en la relación entre Estados Unidos y México, (…) es una alianza, lo estamos haciendo juntos. Hay un respeto a la soberanía de México, pero poniendo la visión, los recursos de las dos naciones para trabajar en estos grupos que son tan importantes: para proteger a nuestra gente, (…) en la prevención del crimen», aseguró el Embajador Salazar.
NACE EL ENTENDIMIENTO BICENTENARIO
El Entendimiento Bicentenario, llamado así porque en 2022 se cumplen los 200 años de relaciones diplomáticas entre México y Estados Unidos, es un acuerdo de cooperación con un enfoque integral para combatir las causas de la violencia.
El Canciller Marcelo Ebrard calificó la instalación como un hecho «histórico», puesto que este martes el nuevo plan de seguridad se vuelve operativo. «El acta de defunción de la Iniciativa Mérida ya se había extendido, hoy extendemos el acta de nacimiento del Entendimiento Bicentenario», indicó.
?Entre los objetivos concretos en los que se trabajará destacan:
✅Proteger a nuestra gente,
✅Prevenir los crímenes transfronterizos,
✅Perseguir a las redes criminales,
✅Fuerzas armadas,
✅Comité Binacional de Cooperación.#SociosVecinosAmigos
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Los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden quieren con esto abordar asuntos como el tráfico de armas de Estados Unidos hacia México y atender las adicciones a las drogas con un enfoque de salud pública.
La Secretaria de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez, puntualizó que el objetivo del nuevo plan es combatir la violencia, la impunidad, la corrupción, el tráfico ilegal de armas y de drogas, la trata de personas, los crímenes cibernéticos y el lavado de dinero.
«A estos grupos no se les enfrenta de manera unilateral, se requiere la convicción de perseguirlos para llevarlos ante la Justicia en ambos lados de la frontera», declaró Icela Rodríguez.
En este sentido, el Embajador Ken Salazar hizo un llamado a establecer acciones rápidas y concretas, como se hizo al instalar un Grupo de Acción Inmediata (GAI) para perseguir la red de tráfico de personas responsable del accidente vial del pasado viernes en el que murieron al menos 55 migrantes hacinados en un camión en el suroriental estado de Chiapas.
MUERE POLÉMICA INICIATIVA MÉRIDA
El nuevo plan reemplaza a la Iniciativa Mérida, estrategia de 2008 basada en un enfoque militar que impulsaron los entonces presidentes George W. Bush (2001-2009) y Felipe Calderón (2006-2012) para contrarrestar la violencia derivada del narcotráfico.
Desde 2008 hasta 2020, Estados Unidos asignó más de tres mil 200 millones de dólares en equipo, capacitación y apoyo al desarrollo de capacidades a través de la iniciativa.
Pero este plan fue criticado por su excesivo énfasis en las operaciones militares y en la persecución de capos del narco, lo cual no ha conseguido reducir la violencia en México, país que vivió en 2019 y 2020 los dos años con más homicidios de su historia.
Además, prevalecía una gran desconfianza por parte de Estados Unidos hacia las capacidades y voluntades de las autoridades mexicanas para perseguir y enjuiciar a los delincuentes.
Por ejemplo, Genaro García Luna, Secretario de Seguridad en el Gobierno de Calderón, está hoy preso en Estados Unidos acusado de narcotráfico, mientras que el Secretario de Defensa de Enrique Peña Nieto, el General Salvador Cienfuegos, fue capturado por el mismo motivo en Los Ángeles, si bien acabó siendo exonerado.
«La demanda de mayor seguridad exigida por nuestros pueblos sólo puede atenderse a través de este acercamiento basado en la confianza mutua, porque con el puño cerrado no se pude intercambiar un apretón de manos», reivindicó la Secretaria de Seguridad.