El uso del cannabidiol (CBD), uno de los componentes principales de la marihuana podría no considerarse como droga, debido a sus propiedades terapéuticas con fines medicos; la Organización Mundial de la Salud lanza una recomendación para que esta propiedad no se considere como narcótico.
Ciudad de México, 14 de diciembre (Efe).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una recomendación pública para no catalogar el cannabidiol (CBD), uno de los principales componentes activos de la marihuana, como una droga, informó la empresa HempMeds México.
«La evidencia reciente de estudios en animales y humanos muestra que el uso del cannabidiol podría tener algún valor terapéutico para las convulsiones debidas a la epilepsia y las afecciones relacionadas», expresó la OMS, de acuerdo con un comunicado de HempMeds.
De acuerdo con el organismo, cuando el cannabidiol tiene un uso terapéutico, no existe riesgo de que genere dependencia como otros canabinoides.
Raúl Elizalde, presidente de HempMeds México, empresa que vende y distribuye productos derivados de cannabis en Estados Unidos, defendió ante la OMS el uso de la marihuana medicinal durante la reunión 39 del Comité de Expertos en Farmacodependencia en noviembre pasado.
Elizalde habló del caso de su hija Grace, quien padece el síndrome Lennox-Gastaut y debido a ello sufría 400 ataques epilépticos diarios, por lo que buscó que en México se permitiera la importación del cannabidiol como terapia, y así la pequeña se convirtió en la primera beneficiada.
Grace hoy toma cannabidiol puro, importado de Estados Unidos, y ha reducido en 90 por ciento sus convulsiones, según ha expresado Elizalde.
Por su parte el doctor Stuart Titus, presidente ejecutivo de Medical Marijuana , dijo que en la industria esperan que esta recomendación «facilite a las personas en todo el mundo el acceso a productos derivados de CBD para mejorar su calidad de vida».
De acuerdo con la OMS, el cannabis es la droga ilícita más usada a nivel mundial. En 2013 se estimó que 181.8 millones de personas entre 15 y 64 años usaron cannabis con propósitos no médicos.