El plan sería hacer de «Boro la oruga» un largometraje que estaría completado en 2019, según refleja el memorando que Miyazaki le ha presentado al productor de Ghibli Toshio Suzuki.
Tokio, 14 noviembre (EFE).- El maestro de la animación nipona, Hayao Miyazaki ha reconocido que quiere volver a dirigir un largometraje, empleando además tecnología digital, pese a haber anunciado oficialmente su retirada hace ya más de tres años.
El cineasta, de 75 años, indicó esta posibilidad durante un programa especial emitido por la cadena pública japonesa NHK en la noche del domingo.
El documental se centró en acompañar a Miyazaki durante toda la producción de «Kemushi no Boro» (en español, «Boro la oruga»), un cortometraje que ha dirigido para el museo de Studio Ghibli en Tokio y en el que ha elaborado por primera vez dibujos con el uso de herramientas digitales.
El plan sería hacer de «Boro la oruga» un largometraje que estaría completado en 2019, según refleja el memorando que Miyazaki le ha presentado al productor de Ghibli Toshio Suzuki.
«Aún no se lo he dicho a mi mujer. Pero una vez lo haga soy consciente de que puedo morir a mitad de camino (de terminar el filme). Pero tengo el convencimiento firme de hacerlo», declaró Miyazaki en el documental.
«Es mejor morir mientras estoy en ello, que morir sin hacerlo», le explicó además a Suzuki.
El cineasta admitió también en el documental que durante la producción del corto ha pasado de verse a sí mismo como «un viejo jubilado» a «sentir que resucitaba» mientras dibujaba con una «tablet» y trabajaba con los miembros más jóvenes de Ghibli.
«Boro la oruga ha sido una lucha para Miya-san (Miyazaki). Se ha alegrado a veces y se ha desesperado otras tantas. Hayao Miyazaki es el tipo de persona que va producir películas hasta su muerte. Y Ghibli seguirá mientras Miya-san produzca películas», explicó por su parte Suzuki, de 68 años.
Miyazaki y Suzuki, fundaron en 1985 Studio Ghibli junto al también director Isao Takahata y al editor y productor Yasuyoshi Tokuma.
La productora tokiota se convirtió con el tiempo en el estudio de animación más respetado del país, especialmente gracias al éxito de público y crítica de películas dirigidas por Miyazaki como «Princess Mononoke»/»La princesa Mononoke» (1997) o «Spirited Away»/»El viaje de Chihiro» (2001), ganadora del Oscar a mejor cinta de animación.
El futuro de Ghibli se sigue con especial atención después de que en septiembre de 2013 Miyazaki anunciara que se retiraba y que no dirigiría más largometrajes.