A 11 días del accidente en la mina «El Pinabete», los familiares de los trabajadores atrapados lanzaron un ultimátum para tener respuesta del Presidente, mientras que el equipo Interinstitucional de Rescate trabaja las 24 horas y la iglesia católica demanda mejores condiciones laborales.
Sabinas, Coahuila/Ciudad de México, 1 de agosto (Vanguardia/SinEmbargo).- La iglesia católica mexicana hizo un llamado este domingo a la industria minera a garantizar las medidas de seguridad y dignidad necesarias para sus trabajadores, luego de recordar la inundación de la mina de carbón “El Pinabete” en Agujita, comunidad ubicada en el municipio de Sabinas, Coahuila, donde 10 mineros llevan más de una semana atrapados.
«Hoy, otros Lázaros están muriendo también, ahora en el fondo de un pozo de carbón. Y el olvido se traduce en no levantar la voz contra una industria minera que debe garantizar las medidas de seguridad y dignidad necesarias para que puedan desarrollar sus actividades», dijo hoy en su editorial del semanario Desde la fe.
En el texto, titulado «Los olvidados de siempre», la Arquidiócesis de México señaló que «la tragedia de El Pinabete, en Sabinas, Coahuila, donde 10 mineros llevan más de una semana atrapados, no es la primera, también está Pasta de Conchos, cuyas familias formaron una organización que ahora está levantando la voz por los trabajadores de Sabinas».
«Los familiares de los mineros de El Pinabete han declarado que los trabajadores no estaban dados de alta en una nómina, no tenían seguro social ni acceso a vivienda y lo único que recibían cada sábado era un sobre con el dinero que lograron durante una semana, el cual podía ir desde los dos mil pesos», acusó.
La iglesia católica afirmó que también han surgido dudas sobre la propia mina. «El pozo se convirtió en una bomba de tiempo, alrededor todo era un gran depósito de agua que amenazaba con entrar a su área de trabajo en cualquier momento. Y de acuerdo con los familiares, los propios mineros lo alertaron», se lee en el editorial.
Además, aseguró que «nos hemos acostumbrado a no exigir el nombre y la dignidad de aquellos hermanos que trabajan en las minas y en otros oficios a los que no solemos mirar».
«La inundación en este pozo se nos convierte en un reclamo de Dios para que rescatemos del olvido a tantos hermanos y hermanas nuestros en igual peligro. Nos pide reconocer a los Lázaros de nuestra puerta y saberles dar nombre, espacio en el corazón y reconocimiento en nuestras decisiones y legislaciones», agregó la comunidad católica.
Por último, subrayó que «el sufrimiento de los mineros del carbón y de muchos a quienes no volteamos a ver también nos pide una respuesta».
FAMILIAS DE MINEROS TEMEN «CARPETAZO»
Después de 11 días de la inundación de la mina de carbón “El Pinabete”, los familiares de los 10 mineros que permanecen atrapados dijeron que los esfuerzos que se realizan son insuficientes, por lo que temen haya «carpetazo» como en Pasta de Conchos.
En sus declaraciones, los familiares de los mineros subrayaron que temen que las autoridades les pidan que se olviden de recuperar los cuerpos, como sucedió hace 16 años en Pasta de Conchos.
Al mismo tiempo, solicitaron que los trabajos no paren por las noches, ya que cerca de las 3:00 horas -aseguraron- se suspenden las labores al interior del campamento y se detienen las bombas que drenan el agua.
Gabriel Rodríguez, hermano de Margarito, uno de los 10 mineros atrapados, señaló que las autoridades les piden que guarden la calma y esperen a que existan las condiciones necesarias para la seguridad de los buzos.
“Lo que queremos es que nos ayuden otros mineros, expertos del extranjero, pero lo que queremos es que saquen a nuestros familiares”, subrayó.
A pregunta expresa de Vanguardia sobre la posibilidad de que otros mineros ingresen para efectuar el rescate de sus familiares, Rodríguez Palomares señaló que “en eso no nos dejan siempre nos retiran a más de 100 metros del pozo, no nos dejan acercarnos”.
Por otro lado, Sergio Alejandro Martínez Valdez, hermano de Jorge Luis Martínez, otro de los mineros atrapados, dijo que la información sobre los trabajos fluye de manera esporádica.
Ante este escenario, aseguran que la sugerencia que han reiterado los mineros y demás familiares a las autoridades es que se coloquen bombas para drenar el agua de la mina “Las Conchas”, y que se intenten hacer perforaciones por sus túneles para poder ingresar a través de ellos hasta “El Pinabete”, o bien que se tape el boquete que sigue permitiendo que corra el agua entre la mina y los pozos.
Durante su intervención, la esposa de Jaime Montelongo, minero de 61 años que quedó atrapado, señaló que hasta este sábado a las 16:30 horas, tenían más de 18 horas sin información oficial por parte de la coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez.
Por su parte, Martha María Huerta, esposa de Sergio Gaytán, reveló que sus compañeros sobrevivientes, así como los que trabajan en pocitos aledaños, han exigido que se les permita ingresar a la mina y que están dispuestos a firmar una responsiva para deslindar a las autoridades de cualquier accidente.
Finalmente, lanzaron un ultimátum al Presidente de la República para exigirle que se presente en el lugar y dialogue con los familiares o de lo contrario, ingresarán por su propio pie a rescatarlos.
SE TRABAJA 24 HORAS: AUTORIDADES
La Coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, reconoció que los trabajos de rescate se han topado con dificultades que retrasan el ingreso a los pozos y las galerías para la búsqueda de los mineros atrapados.
Sin embargo, negó que el bombeo y el resto de las labores hayan disminuido su intensidad, como denunciaron familiares de los mineros. En entrevista, la funcionaria aseguró que se trabaja las 24 horas del día para extraer el agua y retirar los obstáculos que impiden el ingreso de los rescatistas.
En ese mismo sentido, el Gobierno del estado difundió un comunicado en donde se afirmó que el equipo Interinstitucional de Rescate trabaja las 24 horas del día en labores de extracción de agua, exploración y limpieza de los pozos.
En este boletín se detalló que se han extraído más de 217 mil metros cúbicos de agua.
“La estrategia de la realización de barrenos para evitar el flujo de agua del exterior hacia la mina, ha dado buenos resultados. Durante la noche se continuará bombeando en las perforaciones, en total 213 litros por segundo, con 320 caballos de fuerza en todos los equipos instalados”.
Además, están instaladas cinco bombas en los pozos de agua, con capacidad total de 370 caballos de fuerza, que trabajarán en extraer agua durante toda la noche.
