La calificación 5 es para las naciones donde “si bien la legislación puede enumerar ciertos derechos, los trabajadores carecen efectivamente de acceso a ellos y está por tanto expuestos a unos regímenes autocráticos y a unas prácticas laborales injustas”. México está acompañado en este grupo por países como Arabia Saudita, China, Colombia, Corea, Ecuador, Egipto, Filipinas, Grecia, Guatemala, Honduras, India, Irán, Nigeria, Pakistán, Qatar y Ucrania.
Ciudad de México, 14 de junio (SinEmbargo).- México se encuentra entre “los peores países del mundo para trabajar” en el Índice Global de los Derechos de la Confederación Sindical Internacional. Nuestro país se encuentra en la categoría 5 de este ranking por ser una nación que no garantiza los derechos de los trabajadores.
En esta categoría están los países donde “si bien la legislación puede enumerar ciertos derechos, los trabajadores carecen efectivamente de acceso a ellos y está por tanto expuestos a unos regímenes autocráticos y a unas prácticas laborales injustas”, detalla la descripción de esta clasificación.
En este grupo se encuentran en total 32 países: Arabia Saudita, China, Colombia, Corea, Ecuador, Egipto, Filipinas, Grecia, Guatemala, Honduras, India, Indonesia, Irán, Nigeria, Pakistán, Qatar, Turquía y Ucrania, son algunos de los países que acompañan a México.
El último de los niveles del índice, el 5+, de “Derechos no garantizados debido a la desintegración del Estado de derecho”, están países donde los “están igual de limitados que en los países del grupo 5. No obstante, en los países del grupo 5+ la situación está vinculada a unas instituciones disfuncionales como resultado de un conflicto interno y/o una ocupación militar”.
En total son seis categorías las que contempla el índice. La 1 agrupa a los países con Violaciones esporádicas de los derechos humanos; en ellos, “los derechos laborales colectivos están por lo general garantizados”.
La mayoría de las 13 naciones con esta clasificación son europeas y sólo hay una de América: Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Italia, Noruega, Suecia, Uruguay, entre otros.
La segunda, “Violaciones repetidas de los derechos”, agrupa a las naciones donde “ciertos derechos han sido objeto de repetidos ataques por parte de los Gobiernos y/o las empresas y han socavado la lucha para conseguir unas condiciones laborales mejores”.
Esta clasificación la tienen 25 países, entre ellos: Barbados, Belice, Canadá, Francia, Jamaica, Japón, Nueva Zelandia, Portugal, República Checa, República Dominicana, Suiza, Taiwán.
En el tercero, “Violaciones regulares a los derechos”, están las naciones cuyos “gobiernos y/o empresas interfieren regularmente en los derechos laborales colectivos, o no garantizan plenamente aspectos importantes de dichos derechos”.
26 naciones están en este grupo, entre ellas: Australia, Bahamas, Chile, El Salvador, España, Hungría, Madagascar, Marruecos, Nepal, Reino Unido, Venezuela.
En el cuarto, “Violaciones sistemáticas de los derechos”, están los países donde los trabajadores “ han denunciado violaciones sistemáticas. El Gobierno y/o las empresas están firmemente decididos a acallar la voz colectiva de los trabajadores poniendo en peligro los derechos fundamentales”.
En este grupo están 34 naciones, entre ellas: Argentina, Bolivia, Brasil, Camerún, Estados Unidos, Etiopía, Iraq, Kenya, Panamá, Paraguay, Perú, Tailandia, Trinidad y Tobago, Vietnam.
AMÉRICA, VIOLENCIA Y REPRESIÓN
El documento detalla que en el continente americano se han detectado de violaciones regulares de los derechos laborales a violaciones sistemáticas de los derechos.
“El continente americano sigue plagado por un clima generalizado de extrema violencia y represión contra los trabajadores y sindicalistas”, detalla el Índice Global.
“Las prácticas antisindicales siguen estando muy extendidas en muchos países latinoamericanos. Los sindicatos se enfrentan a una reiterada denegación del registro y un grave menoscabo de los derechos de negociación colectiva con la prevalencia de contratos de protección y la creación de sindicatos amarillos para impedir una genuina representación de los trabajadores”, agrega.
En México, ejemplifica el Índice, se denegó el registro en tres ocasiones al sindicato de la confección Cone Denim Yecapixtla y, entre tanto, la compañía registró su propio sindicato amarillo.
Del mismo modo, el registro de SNTEPE-PEMEX en la industria de gas y petróleo, fue deliberadamente retrasado por el ministerio desde 2014, sin causa justificada. Despidos y otras medidas discriminatorias antisindicales son también comunes.
México también es uno de los nueve países de América Latina que ha registrado el asesinato de sindicalistas.
En el continente el 64 por ciento de los países excluyen a trabajadores de la legislación laboral, mientras el 16 de los 25 países se vulneran los derechos de negociación colectiva y de huelga.