Bangkok, 30 may (EFE).- La Marina de Malasia y las autoridades fronterizas han detectado tres barcos sospechosos de transportar inmigrantes indocumentados en el estrecho de Malaca, informan hoy medios locales.
Las naves fueron avistadas por helicópteros cerca de la isla de Jarak, en el estado occidental de Perak, informó a los medios el ministro de la Oficina del Primer Ministro, Shahidan Kassim, según informó la agencia Bernama.
Unos 3.000 inmigrantes, la mayoría pertenecientes a la etnia musulmana rohinyá perseguidos en Birmania (myanmar) y bangladesíes que huyen de la pobreza, han desembarcado en Indonesia o Malasia desde que se reportara a inicios de mes una crisis migratoria sin precedentes en la región.
«Sabemos que vendrán más y urgimos y esperamos que aquellos países que han expresado su preocupación acepten los inmigrantes ilegales y refugiados», instó Shahidan, quien también ocupa el puesto de jefe en el Consejo de Seguridad Nacional.
Unas 25 mil personas zarparon en barcos desde Bangladés y Birmania hacia Tailandia, Malasia e Indonesia durante el primer trimestre de 2015, el doble del número registrado en el mismo periodo del año pasado, de acuerdo con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Según estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), unas 2 mil 600 personas seguirían atrapadas en alta mar en el golfo de Bengala.
Tailandia, que a principios de mes encontró de decenas de tumbas en campos clandestinos en el sur del país, auspició ayer una reunión especial donde los 17 países afectados se comprometieron a reforzar la seguridad de la región con la prioridad de «salvar las vidas» de aquellos que puedan encontrarse aún en las aguas.
El pasado lunes, Malasia también informó del hallazgo de 28 campamentos y 139 tumbas en el norteño estado de Perlis, en la jungla que cubre la frontera que Malasia y Tailandia comparten.
Los restos humanos descubiertos podrían pertenecer a víctimas de tráfico humano, buscadores de asilo o inmigrantes.
Indonesia y Malasia se comprometieron la semana pasada a acoger a todos los inmigrantes en alta mar siempre que la comunidad internacional se comprometa a reubicarlos en el plazo de una año.