Governador Valadares (Brasil), 13 nov (dpa) – La avalancha de lodo y residuos de una mina de hierro que inundó una vasta región de Minas Gerais llegó al río Rio Doce, la principal cuenta hídrica del sureste de Brasil, y ya ocasionó el corte de suministro de agua en la ciudad de Governador Valadares.
Según informó hoy la agencia oficial de noticias ABR, Valadares, con unos 280 mil habitantes, es por el momento la ciudad más afectada por la falta de agua potable. La población se encuentra a unos 300 kilómetros de Mariana, donde el pasado 5 de noviembre se rompieron los diques de contención que generaron la catástrofe.
Se calcula que el vecino estado de Espíritu Santo, que tiene frontera también con Río de Janeiro, podría tener problemas de abastecimiento de agua a partir del fin de semana.
Las autoridades municipales de Valadares han decretado el estado de decretaron estado de calamidad pública (catástrofe).
El jueves, habitantes del lugar bloquearon la línea férrea que utiliza la empresa dueña de los diques rotos, Samarco, que pertenece a la gigante brasileña Vale y la australiana BBP Billito. El bloqueo fue para protestar por los perjuicios ocasionados por el accidente y exigir el restablecimiento del suministro de agua.
Citada por ABR, Samarco informó que envió a Governador Valadares más de 2.5 millones de litros de agua para reforzar el abastecimiento, y 13.000 litros de agua potable. Además, se comprometió a enviar a partir de hoy 2.4 millones de litros por día.
Por el momento se desconocen las razones de la rotura de diques que provocó la muerte de ocho personas. Otras 20 siguen desaparecidas. La riada destruyó por completo el pueblo Bento Rodrigues, en las afueras de Mariana, donde vivían unas 600 personas.
Además, provocó un desastre ambiental de grandes proporciones, por lo que la Presidenta Dilma Rousseff anunció que el Gobierno exigirá a las tres empresas involucradas el pago de una multa de 250 millones de reales (unos 65.7 millones de dólares).