El ataque se produjo en una parada de autobuses urbana en la vía Ajuza 98, la principal que recorre de la ciudad, y varios viandantes lograron neutralizar al agresor y derribarlo al suelo.

Una portavoz policial precisó que el autor del acuchillamiento es residente de Jerusalén Este, que «llegó a la parada de autobús y agredió a un hombre que esperaba allí. Varias personas que se encontraban en el lugar lo redujeron».

Tanto el agresor como la víctima fueron trasladados a un hospital de la urbe.

Medios locales informaron de que el agresor es palestino, tiene 22 años y sus heridas son leves, aunque la policía las clasifica de moderadas.

De acuerdo al Canal 10 de la televisión israelí, la víctima de 32 años, un residente en Ranana, fue apuñalado en la espalda y sus heridas no revisten gravedad.

De acuerdo a un residente de la ciudad que participó en la aprehensión del individuo, éste no resultó herido de bala -como habían informado algunos medios- sino por los fuertes golpes que le propinaron los vecinos y que le hicieron perder el conocimiento.

El alcalde de la ciudad, Zeev Bielski, relató al medio que el atacante apuñaló a una persona y que varios ciudadanos lograron neutralizarlo.

«El herido, pese a la profundidad de sus cortes logró comunicarse con el personal médico. Y el terrorista fue evacuado en situación grave. Es un hombre joven, quién sabe lo que se les pasa por la cabeza a esas personas», comentó el regidor al canal televisivo.

Ayer se produjeron cinco ataques similares, con apuñalamientos e intentos de apuñalamiento de palestinos a israelíes, todos ellos en Jerusalén, en los que se registraron 5 israelíes heridos, dos de los cuales, de 13 y 24 años, se encuentran graves, y tres de los atacantes fueron muertos y otros dos heridos y detenidos.

Desde el pasado 3 de octubre se han registrado, con este último, 19 apuñalamientos o intentos de apuñalamientos por palestinos, y un caso en el que un extremista judío atacó con arma blanca e hirió a cuatro árabes, en la ciudad israelí de Dimona.

La región vive una oleada de violencia desde el primer día del mes, cuando dos colonos judíos fueron asesinados en el territorio ocupado de Cisjordania, suceso que fue seguido de revueltas y disturbios, además de la cadena de apuñalamientos, que han acabado con la vida de 28 palestinos y 4 israelíes.