Verily, filial de Alphabet para las ciencias de la vida, se une con la farmacéutica Sanofi para desarrollar nuevos wearables y plataformas online orientadas a diabéticos.
Por Alberto Iglesias Fraga
Ciudad de México, 13 de septiembre (SinEmbargo/Ticbeat).- En septiembre del pasado año, Google y Sanofi decidieron aliarse en la lucha contra la diabetes. Ahora esa compenetración se materializa en una alianza estratégica en la que Verily, firma centrada en las ciencias de la vida de Alphabet -actual matriz de Google-, y la popular farmacéutica invertirán cerca de 500 millones de dólares; todo ello con el fin de combinar nuevos dispositivos con servicios de tecnología que ayuden a estos pacientes.
“La empresa va a aprovechar la experiencia de Alphabet en la electrónica miniaturizada, análisis y desarrollo de software de consumo, con los conocimientos y la experiencia en producir nuevos tratamientos innovadores para las personas que viven con diabetes de Sanofi”, han explicado ambas compañías en un comunicado oficial.
El convenio se llamará Onduo y se centrará inicialmente en la comunidad de la diabetes tipo 2, específicamente en el desarrollo de soluciones que ayuden a los enfermos a tomar mejores decisiones sobre su salud en el día a día, como la mejora de la administración de medicamentos o el fomento de buenos hábitos. Un objetivo muy amplio que se concretará en objetos conectados (incluyendo plumas de insulina vinculadas a una app) o plataformas online específicas para los afectados por la diabetes.
Este importante anuncio se produce apenas un mes después de Verily también llegara a un acuerdo con la farmacéutica británica GlaxoSmithKline (GSK) para crear una empresa especializada en la bioelectrónica clínica, consistente en enfrentar enfermedades mediante la identificación de señales eléctricas a lo largo y ancho del cuerpo humano.
Recordemos que la diabetes es una de las enfermedades crónicas más populares, que afecta actualmente a 382 millones de personas, con cerca del 90 por ciento de ellos sufriendo diabetes de tipo 2. Por si fuera poco, se trata de una cifra que no parará de aumentar hasta alcanzar los 600 millones de pacientes de cara a 2035.