La Aspirina es uno de los fármacos más utilizados a nivel global, con un consumo aproximado de hasta 120 mil millones de pastillas al año. En 2005, la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó al ácido acetilsalicílico, ingrediente activo de la Aspirina, en su “Listado modelo de medicamentos esenciales”. Sin embargo, las opiniones sobre sus beneficios y perjuicios se dividen entre los científicos.
Ciudad de México, 13 de mayo (SinEmbargo).– Las opiniones sobre la Aspirina están divididas: algunos estudios especializados aseguran que el fármaco es útil para prevenir infartos y algunos tipos de cáncer; otros, por el contrario, alertan que el medicamento lanzado al mercado en Alemania en 1899 tiene impactos negativos en la salud, al considerar que puede desencadenar problemas renales e intestinales.
En entrevista para SinEmbargo, el doctor Abelardo Ávila Curial, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, planteó que se trata de un tema «muy polémico, complejo y cruzado de intereses económicos», y agregó que como todo medicamento, la Aspirina tiene riesgos, algunos de gravedad. Por ejemplo, en población susceptible, es decir aquella que tiene el síndrome de Reye [una enfermedad sumamente infrecuente, pero grave que puede repercutir sobre el cerebro y el hígado, y que suele afectar a niños que se están recuperando de una infección viral], gastritis erosiva, coagulopatías, etcétera.
No obstante, el especialista reconoció que es un fármaco de «enorme» utilidad cuando se indica de manera adecuada y criticó que «muchos de los ataques a su prescripción esconden intereses de los fabricantes de nuevos fármacos alternativos que cuestan cientos de veces más. Todos estos fármacos caros presentan también efectos secundarios importantes y algunos han tenido que ser retirados del mercado debido a su peligrosidad».
La Aspirina es uno de los fármacos más utilizados a nivel global, con un consumo aproximado de 40 mil toneladas al año, o sea 120 mil millones de pastillas. En 2005, la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó al ácido acetilsalicílico, ingrediente activo de la Aspirina, en su “Listado modelo de medicamentos esenciales”. El fármaco trata el dolor, la fiebre y la inflamación.
EL YING Y EL YANG DE LA ASPIRINA
De acuerdo con algunos estudios especializados, entre los órganos que se ven afectados con mayor frecuencia por el abuso en el consumo de los antiinflamatorios son los riñones. En 2010, la Secretaría de Salud, actualmente a cargo del doctor José Narro Robles, registró alrededor de 40 mil nuevos casos de insuficiencia renal en México.
En 2003, por ejemplo, científicos estadounidenses de la Asociación de Nefrología advirtieron que el consumo excesivo de analgésicos es capaz de provocar daños permanentes en dichos órganos.
Dos años después, un análisis hecho por la Universidad de Baylor en Texas, expuso que tomar analgésicos como la Aspirina y el ibuprofeno por un periodo mayor a tres meses, incrementa hasta 70 por ciento la posibilidad de presentar úlceras y daños intestinales.
En la otra cara de la moneda, un artículo publicado por Science Immunology señala que pruebas preclínicas realizadas por científicos de la Universidad Médica de Carolina del Sur (MUSC, por sus siglas en inglés), con una terapia de linfocitos T potenció con mayor eficacia la inmunidad contra melanomas al agregar fármacos antiplaquetarios comunes, como la Aspirina.
«Las plaquetas sanguíneas ayudan a disfrazar el cáncer frente al sistema inmune mediante la supresión de las células T», afirman científicos de la MUSC.
Hace un par de años, una investigación llevada a cabo por científicos del Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en ingés), el cual forma parte de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de Estados Unidos, reveló que las mujeres que toman Aspirina todos los días podrían reducir en un 20 por ciento el riesgo de padecer cáncer de ovario.
Otros análisis señalan que el consumo de Aspirina poco tiempo después de un ataque al corazón reduce el riesgo de muerte e incluso su uso a largo plazo ayuda a prevenir ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
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Al respecto, el doctor Joel Navarro Alvarado, especialista en Medicina Interna y Reumatología, quien labora en el Hospital Central Norte de Petróleos Mexicanos (Pemex), explicó a SinEmbargo que las personas que consumen dosis elevadas de Aspirina, o sea, 500 miligramos al día, para mitigar dolores, inflamación y fiebre, pueden presentar diversos problemas a largo plazo.
Entre los más graves, indicó, se encuentran los gastrointestinales que van desde gastritis leve, hasta úlcera gástrica o úlcera péptica, que puede complicarse incluso con perforación intestinal; inflamación de hígado y riñones; así como aumento en el riesgo de presentar hemorragias internas, ya que una de sus funciones –entre muchas otras– se encuentra la antiagregación plaquetaria, es decir, el medicamento inhibe el sistema de coagulación y en una persona con alteraciones en la coagulación puede incrementar el riego de sangrado a nivel interno.
Dichos padecimientos pueden manifestar síntomas en cuestión de meses o años dependiendo de variables en cada paciente, entre ellas, edad, consumo de otros medicamentos, presencia de enfermedades extra, etcétera.
En cambio, informó, cuando los pacientes consumen la presentación de 100 miligramos cada día disminuyen los efectos gastrointestinales, renales y hepáticos. Además, dijo, tiene beneficios sobre todo cardiovasculares, ya que puede evitar y prevenir riesgos de infartos en corazón y cerebro.
«Cualquier fármaco tiene sus riesgos, ninguno es inocuo y quienes deciden retirar o no un fármaco del mercado son los organismos federales e internacionales, en México, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) es la encargada», destacó Navarro Alvarado.
Por lo anterior, el especialista hizo un llamado a la población a evitar automedicarse y consultar a su médico de cabecera para que sea quien determine qué medicamentos y dosis son las adecuadas para atender sus necesidades.
Las ventas de la medicina que se comercializa en México entre los 25 y los 60 pesos, dependiendo de la presentación, según la empresa químico-farmacéutica Bayer, incrementaron particularmente en Latinoamérica y Estados Unidos.