El proceso contra Manafort es producto de la investigación de la la llamada «trama rusa», liderada por el Fiscal especial Robert Mueller, pero no está relacionado con las actividades que desempeñó dentro de la campaña de Trump.
Washington, Estados Unidos, 13 de marzo (EFE).– La Fiscalía de Nueva York acusó este miércoles a Paul Manafort, ex jefe de campaña del presidente deEstados Unidos, Donald Trump, de cinco delitos de fraude fiscal y bancario, poco después de conocerse una segunda condena contra Manafort, que tendrá que cumplir más de 7 años de prisión.
Las nuevas incriminaciones han sido elevadas por el Fiscal del distrito sur de Nueva York, Cyrus Vance, «por un fraude hipotecario de un año de duración, mediante el cual Manafort y otras personas falsificaron registros comerciales para obtener ilegalmente millones de dólares».
Una corte del Distrito de Columbia condenó esta mañana al ex jefe de campaña de Trump a tres años y medio, después de una condena previa a casi cuatro años de cárcel que recibió en otro proceso judicial la pasada semana, en el estado de Virginia.
La jueza Amy Berman Jackson subrayó que el ex jefe de campaña de Trump ha pasado gran parte de su trayectoria dedicado a «engañar al sistema».
«Decir que siente haber sido atrapado no es una inspiradora petición de clemencia (…) Este acusado no es el enemigo público número uno pero tampoco es una víctima», afirmó la jueza.
Manafort, de 69 años de edad, deberá devolver, además, 6 millones de dólares.
El proceso contra Manafort es producto de la investigación de la la llamada «trama rusa», liderada por el Fiscal especial Robert Mueller, pero no está relacionado con las actividades que desempeñó dentro de la campaña de Trump.
Mueller acusa a Manafort de haber creado una «red de entidades y cuentas bancarias» en diferentes países para ocultar hasta 75 millones de dólares que obtuvieron principalmente del Gobierno prorruso de Ucrania y de oligarcas rusos.
Manafort, que dirigió la campaña de Trump entre mayo y agosto de 2016, tuvo que dimitir tras descubrirse que había recibido 12,7 millones de dólares por asesorar en secreto al ex Presidente ucraniano Víktor Yanukóvich (2010-2014), vinculado a Moscú.