Atenas, 17 feb (EFE).- El primer ministro griego, Alexis Tsipras, anunció hoy que su Gobierno «no dará marcha atrás» y, a partir del jueves, presentará en el Parlamento las primeras medidas prometidas a los electores.
«No chantajeamos, pero tampoco nos dejamos chantajear. Trabajamos por un acuerdo sin austeridad y sin memorando, por un acuerdo sin la parte tóxica de la troika», dijo Tsipras ante el grupo parlamentario de su formación izquierdista Syriza en una intervención retransmitida en directo.
Tsipras informó de que este mismo jueves, después de la elección del presidente de la República prevista para mañana, se introducirá en el Parlamento la primera ley para proteger contra los desahucios de primera vivienda y para impedir las transferencias de débitos morosos a «cazadores de deudas».
Añadió que el jueves también se llevará al Parlamento la ley que amplía el círculo de personas que pueden acogerse al pago en cien plazos de sus deudas a Hacienda, lo que, afirmó, «aliviará el peso de muchas familias».
«Espero que estas dos leyes se hayan aprobado para el viernes por la tarde para que el pueblo sepa quién está de su lado y quién está del lado de los intereses oligarcas», indicó.
El líder izquierdista avanzó que en breve el Gobierno presentará una ley que pondrá fin a la desregulación de la legislación laboral, emprendida por el anterior Ejecutivo de Andonis Samarás, que, entre otras medidas, liberalizó el despido y abolió de facto los convenios colectivos.
«En cooperación con la Organización Internacional del Trabajo restituiremos (en Grecia) la legislación europea en materia de relaciones laborales», resaltó.
Tsipras aseguró que su Gobierno no tiene intención de dar «ni un solo paso atrás» de su programa adoptado por el Parlamento hace unos días y prometió que en breve se legislarán todas las medidas para hacer frente a la crisis humanitaria.
«No pondremos en juego la confianza del pueblo a favor de los intereses de los acreedores», declaró Tsipras, para agregar que la «primera deuda» que tiene que devolver Grecia es la de hacer frente a la «crisis humanitaria» que padecen muchos ciudadanos. EFE