Ciudad de México, 1 de enero (SinEmbargo).– Marcharon por Avenida de la Reforma. Pasaron a un lado del templete que el Gobierno del Distrito Federal (GDF) colocó para la celebración de fin de año. Llegaron hasta el Monumento a la Independencia y se encaminaron hacia Avenida Chapultepec.
Eran unos 300 y los padres de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa se encaminaron hacia Los Pinos por Constituyentes. Pero no llegaron.
Prometieron que no descansarían ni en Navidad ni en Año Nuevo y lo cumplieron: marcharon exigiendo justicia, pero antes de llegar a Los Pinos, en Constituyentes los esperaban 500 granaderos con tanquetas que impidieron su arribo a la residencia presidencial.
Los padres de los 43 desaparecidos y los granaderos quedaron frente a frente, a unos 10 metros de distancia. Entonces los papás de los estudiantes reclamaron la represión y le gritaron consignas al Presidente Enrique Peña Nieto.
"¡Ahí está el gobierno represor! ¡Nosotros estamos aquí para demostrarle a Peña Nieto que no descansaremos, que seguimos adelante y que haremos movilizaciones más fuertes!", gritó uno de los padres de familia.
Las madres encendieron veladoras y sujetaron las fotografías de los normalistas desparecidos. El mitin que se realizaría en Los Pinos, se dio en Constituyentes.
Minutos antes durante la marcha, la vanguardia estuvo encabezada por un grupo de jóvenes encapuchados y detrás los papás con las fotografías de los estudiantes.
Uno de los papás habla a través de un megáfono: “Tú [Ángel] Aguirre [Rivero, Gobernador con licencia de Guerrero], y Peña Nieto no tienen piedad de nada ni de Dios, lo que hicieron a nuestros hijos no tiene madre”, dijo.
El hombre, un campesino de Guerrero, gritó por su hijo y le prometió que no lo olvidará.
Ese mismo campesino tomó la palabra durante el mitin frente a los granaderos: “Peña Nieto ten el valor de soltarlos y dejarlos libres”, dijo.
“Nuestros hijos no son ricos, son pobres, hijos de campesinos que no las pasamos de sol a sol. Nuestros hijos querían tener algo más en la vida, ¿por qué se los llevaron? Ellos no quería andar en el rayo del sol, los padres ya estamos impuestos al campo. Yo le decía: ‘haga algo en la vida hijo, nosotros como padres ya estamos impuestos, ustedes que están jóvenes pueden hacer algo más’, pero vean lo que les hicieron. Lo que hizo este pinche gobierno no tiene madre”, siguió.
INICIO DE AÑO Y REPRESIÓN
Los padres y activistas que participaron en la marcha y en el mitin coincidieron en el clima represor que se respira alrededor del caso de los jóvenes de Ayotzinapa.
"El festival de Miguel Ángel Mancera y estas decenas de granaderos muestran que primero está la represión y la diversión, que resolver los problemas del país", dijo uno de los activistas que participó en la manifestación de los padres de los 43 estudiantes.
Durante el mitin hablaron tres papás de los jóvenes y varios activistas de distintas organizaciones como la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
“Vamos a continuar haciendo movilizaciones más fuertes, porque no nos ha dado ninguna respuesta. Estamos muy indignados con este horrible crimen que cometieron. Ellos se preparaban para ser maestros, no para ser criminales, pero parece que a este gobierno le interesa más preparar criminales como esos de la Gendarmería”, dijo otro de los papás al megáfono.
Ese mismo padre indicó que durante los meses que siguieron a la desaparición de los normalistas, las familias fueron engañadas por el gobierno federal.
“Sus cuentos ya no no los comemos, ni no los hemos comido. Hemos hecho el teatro de que les creemos, nomás para ver si nos entregan a nuestros hijos, pero nos han engañado, ahí nomás nos traen buscando fosas”, dijo.
El padre de uno de los 43 señaló que 25 días antes de la desaparición de los estudiantes en Iguala, fueron amenazados por las autoridades en ese lugar, cuando los jóvenes realizaban una de sus actividades.
“Cuando andaban boteando les dijeron que si volvían los iban a matar y se los cumplieron. La segunda vez fueron desaparecidos y otros caídos. El gobierno es el culpable. Fue el Estado”, dijo.
“PEÑA NOS MINTIÓ”
Los padres de los normalistas aseguraron durante el mitin que Peña Nieto les mintió, pues no cumplió la promesa que les hizo el 29 de octubre, cuando los recibió en Los Pinos.
A diferencia de hace dos meses, ayer, los recibió con granaderos y sin resultados en la búsqueda de sus hijos.
“No dijo que iba hacer todo lo posible por castigar a todos los involucrados, desde los materiales hasta los intelectuales, y no hizo nada. Ahí Aguirre se anda paseando por todo el país como si nada”, dijo.
El papá de uno de los normalistas recordó que los guerrerenses votaron por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), porque creyeron que habría un cambio.
“Pero demostraron que todos son lo mismo. Con esto que pasó mostraron su verdadero rostro, que son tan malditos y corruptos como los demás. Nosotros no vamos a descansar hasta llegar a las últimas consecuencias. Los padres no estamos cansados, vamos a seguir luchando por la presentación con vida de nuestros estudiantes”, dijo.
El mitin concluyó alrededor de las once de la noche con la quema de tres piñatas: una de Enrique Peña Nieto; otra de Jesús Murillo Karam, Procurador de la República y una más de María de los Ángeles Pineda, esposa de José Luis Abarca, el ex Alcalde perredista involucrado en el asesinato y desaparición de normalistas.
Al final, los padres abordaron los tres autobuses donde se trasladaron desde Guerrero al Distrito Federal y Avenida Constituyentes y sus alrededores quedó sola, en el silencio, vacía y sin movimiento.