El gobernador de Banco de México, Agustín Carstens Carstens, expuso que el banco central cuenta aproximadamente con 39 mil millones de dólares en sus reservas internacionales para enfrentar periodos de alta volatilidad y contener la depreciación del peso frente al dólar. Durante las subastas diarias, reveló, se usaron 30 mil 277 millones de dólares de las reservas.
Ciudad de México, 12 de abril (SinEmbargo/EconomíaHoy).– El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens Carstens, prevé que con los remanentes de operación la deuda tendrá un comportamiento más favorable y disminuirá entre 0.8 y 1 por ciento respecto al Producto Interno Bruto (PIB).
«[La deuda] tendrá un comportamiento más favorable una vez que la Secretaría de Hacienda aplique el remanente de operación extraordinario que le entregó el Banxico», dijo durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público (CHCP) del Senado de la República.
El banco central reportó un remanente de operación de 239 mil 093 millones de pesos en 2015. Hacienda detalló ayer que 167 mil millones de pesos, equivalentes al 70 por ciento de los remanentes, se destinarán a recomprar deuda existente del Gobierno Federal y a disminuir el monto de colocación de deuda del Gobierno Federal durante 2016.
Este uso para amortizar la deuda, consideró Carstens hoy, «es adecuado».
Del 30 por ciento restante, 70 mil millones de pesos se destinarán a una aportación al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios, y aproximadamente 1.7 mil millones de pesos se utilizarán para pagar aportaciones pendientes a organismos internacionales.
El gobernador del Banxico también expuso que cuenta aproximadamente con 39 mil millones de dólares en sus reservas internacionales para enfrentar periodos de alta volatilidad que presionen nuevas subastas en el mercado para contener la depreciación del peso frente al dólar.
Durante las subastas diarias, reveló, se usaron 30 mil 277 millones de dólares de las reservas.
Hasta febrero de este año el banco central mantuvo el mecanismo de la subasta diaria de dólares con precio mínimo y máximo, mismo que implementó desde diciembre de 2014 como una alternativa para dar «certidumbre y liquidez al mercado». Ese año el peso comenzó a perder terreno frente al dólar.
El tipo de cambio pasó de 19.40 pesos por dólar a 17.50 pesos por unidad estadounidense, explicó Carstens.
Agregó que la economía de México seguirá creciendo por debajo de su potencial real, entre un rango de 2 y 3 por ciento para 2016 y entre un intervalo de 2.5 y 3.5 por ciento en 2017, considerando el «entorno internacional adverso».
Esta mañana el Fondo Monetario Internacional recortó su proyección de crecimiento económico para América Latina. En su informe el organismo confirmó una contracción de 0.5 por ciento en la región.
Respecto a la proyección de la expansión del PIB mexicano, el FMI refirió que continuaría creciendo a un ritmo moderado de 2.4 por ciento en 2016 y 2.6 por ciento en 2017, lo que supone una rebaja de 0.2 y 0.3 décimas respectivamente.
Para este año la Secretaría de Hacienda, en los fundamentales del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación consideró un rango de crecimiento de entre 2.6 y 3.6 por ciento.
El titular del banco central adelantó que el débil crecimiento de las manufacturas en Estados Unidos afectará a las exportaciones mexicanas.
