Margaret Harris, la portavoz de la OMS, explicó que la suspensión de la inmunización con la vacuna de AstraZeneca como parte de una medida de precaución mientras se realiza una investigación.
Ginebra, 12 de marzo (EFE).- La decisión de ciertos países europeos de suspender temporalmente el uso de la vacuna de AstraZeneca, al parecer por problemas de coagulación en algunas personas que la recibieron, responde únicamente a un principio de precaución, aclaró hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Recordó que se trata de una medida que afecta a un lote específico de la vacuna que se había distribuido en la Unión Europea.
Ninguna relación causal entre la vacuna y eventos tromboembólicos u otras afecciones relacionadas con coágulos sanguíneos ha quedado en evidencia, indicó la portavoz de la OMS, Margaret Harris.
La suspensión de la inmunización con esta vacuna en concreto «se ha decidido como medida de precaución en tanto se realiza una investigación completa», explicó a la prensa en Ginebra, donde la OMS tiene su sede global.
what you need to know about vaccine side-effects https://t.co/es5itibOP1
— Dr Margaret Harris (@DrMargaretH) March 12, 2021
Recordó que el comité de seguridad de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), reunido este jueves para analizar el asunto, no encontró indicios que de que vacunación fuese causante de esas afecciones.
Un comité de vacunas de la OMS también está haciendo una evaluación constante de la vacuna de AstraZeneca y de las otras contra la COVID-19 que se están administrando en diversos países.
Harris indicó que en respuesta a las preocupaciones que han surgido en cuanto a la vacuna de AstraZeneca, el comité de la OMS está haciendo una evaluación minuciosa y que sus conclusiones -una vez que estén listas- serán hechas públicas.
«La vacunación contra la COVID-19 no reduce las muertes por otras causas múltiples. Los eventos tromboembólicos ocurren en la población, así que no está claro si esto es algo que de todos modos iba a ocurrir o si había alguna relación (con la vacuna)», comentó la portavoz.
La OMS lleva el recuento de 268 millones de dosis administradas hasta el momento en el mundo y no ha detectado ninguna muerte relacionada con alguna de las vacunas utilizadas contra la covid-19.