Venta de drogas y extorsión telefónica son algunos de los negocios de los internos del Reclusorio Norte. El País publicó este día imágenes tomadas apenas el verano pasado en donde se muestra cómo están montados los negocios, incluso ante la presencia de las autoridades.
Así es como se vende drogas en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México con la ayuda de las autoridades pic.twitter.com/JFDXFNMO0o
— EL PAIS América (@elpais_america) 12 de enero de 2017
Ciudad de México, 12 de enero (SinEmbargo).- Alrededor de 100 reclusos ofrecen drogas a los más de 10 mil internos del Reclusorio Norte; otros extorsionan vía telefónica desde pequeños «call centers» montados por los mismos presos, con la ayuda de las autoridades, de acuerdo con las imágenes a las que tuvo acceso el rotativo El País y que publica este día.
Más de doce comercios de droga, instalados en los pasillos del Reclusorio Norte, promocionan entre los presos cocaína, piedra o crack y mariguana, señala el artículo de Juan Pablo Beauregard en el medio español.
Por ejemplo, cuatro o cinco pesos cuesta una dosis de mariguana en un puesto improvisado decorado con cromos de San Judas Tadeo, Jesús Malverde y la Santa Muerte.
También se comercia con el uso de las redes sociales [una hora en Facebook es incluso más cara que medio gramo de cocaína, al menos 40 pesos] y con la propia seguridad de los internos. La cuota para evitar los golpes del custodio es de cinco pesos.
Cien pesos cobran los custodios por permitir una hora de «Oxxos», que son puestos que se encargan de recibir las transferencias bancarias para los reclusos.
Las imágenes, grabadas en junio pasado, muestran a los guardias vestidos de negros, caminando entre los puestos de drogas para cobrar cuotas a los prisioneros.
Afuera de las celdas, en los «call centers» improvisados, hombres con audífonos y micrófonos piden, vía telefónica, a sus víctimas depositar dinero a alguna cuenta a cambio de no hacerles daño a ellos o a sus familias. Los teléfonos para cometer extorsión, incluso son rentados en 150 pesos diarios, señala El País.
