San Francisco (EU.), 11 jul (EFE).- Los principales magnates de los sectores de la tecnología y los medios de comunicación de Estados Unidos se encuentran estos días reunidos en un complejo hotelero en las montañas de Idaho, una reunión que se celebra bajo la más estricta confidencialidad.
El encuentro, organizado anualmente por el banco de inversión Allen & Company, es a puerta cerrada y apenas ha trascendido información sobre sus asistentes o lo que allí se está tratando desde que comenzó, este miércoles.
Sin embargo, los periodistas concentrados en las inmediaciones del complejo hotelero Sun Valley Inn (Idaho) pudieron captar imágenes en los accesos y salidas de algunos de los asistentes al encuentro, entre los que se encuentran la primera y tercera fortuna a nivel mundial, según la lista de millonarios de Forbes: el cofundador de Microsoft Bill Gates y el inversor Warren Buffett.
También fueron vistos por la zona e incluso se pudo llegar a tomar fotografías del presidente del segundo mayor conglomerado de prensa del mundo, News Corporation, Rupert Murdoch, así como del millonario exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg.
Esta exclusiva reunión, que se celebra cada año a principios de julio desde 1983, da cada vez más protagonismo a los directivos de las empresas tecnológicas de Silicon Valley y, este año, también pudo verse al consejero delegado y cofundador de Facebook, Mark Zuckerberg, y a la consejera delegada de Yahoo, Marissa Mayer.
Asimismo, asistieron al encuentro los consejeros delegados de Apple y Google, Tim Cook y Larry Page, respectivamente, y el consejero delegado de Amazon y propietario del diario Washington Post, Jeff Bezos.
Otros de los asistentes son los consejeros delegados de las mayores empresas telefónicas de Estados Unidos, Verizon y AT&T, Lowell McAdam y Randall Stepehnson, respectivamente.
Tal es el grado de secretismo que envuelve el encuentro que, según la revista económica Bloomberg, la principal preocupación de los responsables de seguridad del evento es vigilar los cielos para evitar que haya drones que puedan sobrevolar el complejo hotelero y tomar imágenes de los asistentes y las reuniones.
Aunque se desconoce qué es exactamente lo que se trata en esta reunión anual, la prensa estadounidense apuesta porque es un momento en el que los grandes magnates de las tecnologías y los medios aprovechan para tantear acuerdos, cerrar tratos ya avanzados y conocerse entre ellos. EFE