Rafael Duarte Pereda, empleado del kínder Matatena y esposo de la directora del plantel, es acusado de abuso sexual en contra de al menos seis niños de entre tres y cinco años de edad, uno de ellos con Síndrome de Down. Exámenes realizados por expertos de la PGJDF a tres menores confirmaron el abuso.
Ciudad de México, 11 de mayo (SinEmbargo).- Esta tarde, Leopoldo Rafael Duarte Pereda, acusado de abuso sexual contra al menos seis menores de edad del kínder Montessori Matatena, rindió su declaración ante el Juez 51 del Reclusorio Preventivo Oriente y se dijo inocente.
La audiencia se llevó a cabo a puerta cerrada, será a más tardar el próximo martes cuando resuelva su situación jurídica ya que la defensa del acusado solicitó duplicar el término constitucional de 72 hora para poder ofrecer prueba a favor del detenido.
En caso de ser hallado culpable Duarte Pereda enfrentaría una pena de hasta 13 años de prisión.
La Procuraduría General de Justicia capitalina (PGJDF) confirmó esta mañana que fue detenido Duarte Pereda, empleado del kínder.
A las 8:00 horas de este miércoles, la PGJDF informó en su cuenta de Twitter que la Policía de Investigación aprehendió a Duarte Pereda, quien será trasladado al Reclusorio Oriente y puesto a disposición del juez de la causa.
En entrevista con Radio Fórmula, el Procurador capitalino, Rodolfo Ríos Garza, dijo que gracias a los trabajos de inteligencia realizados por la Policía de Investigación fue que se ubicó a Duarte Pereda, quien, detalló, no puso resistencia al momento de ser detenido.
Ríos Garza dijo que Duarte Pereda será resguardado por las autoridades penitenciarias y que no será víctima de agresiones dentro del Reclusorio como consecuencia de su presunto delito, pues, aseguró, esa situación es sólo una «leyenda».
Ayer, un juez penal emitió orden de aprehensión contra Duarte por el delito de abuso sexual agravado contra tres menores, los cuales acreditaron el abuso a través de peritajes psicológico. Sin embargo, el abogado del presunto pederasta dijo a medios nacionales que su cliente tenía un amparo contra cualquier orden de arresto.
La semana pasada, la Procuraduría capitalina pidió a la Interpol emitir ficha azul para evitar de Rafael Duarte abandonara el país.
El presunto abusador, de 59 años de edad, había presentado un escrito ante el Ministerio Público donde se deslindó de los delitos y pidió se cierre la averiguación previa en su contra al considerar que no existen pruebas de las acusaciones.
Duarte Pereda negó los cargos en su contra el pasado lunes en entrevista con Radio Fórmula. Dijo que todo se trataba de un invento, pues su cargo en el área administrativa le impedía tener cercanía con los menores.
“Mi actividad era inminentemente administrativa […] Yo estaba en la dirección, con mi esposa, trabajando en los recursos que ingresaban a la escuela, en las relaciones con las autoridades […] Básicamente esa era mi función”.
Al ser cuestionado sobre qué motivos tendrían las presuntas víctimas, de entre tres y cinco años de edad, de acusarlo de agresiones sexuales, Duarte Pereda aseguró que ignora la situación. “Yo no hacía nada de eso. Ignoro esa situación, la verdad no sé de dónde venga eso”.
En el mismo espacio informativo, Patricia Guitián, directora del Montessori Matatena y esposa de Duarte Pereda, dijo que un grupo de expertos realizó las pruebas a los menores, cuyo resultado inicial negó signos de abuso sexual.
La directora del colegio dijo que el proceso legal ha sido entorpecido por la presión mediática que “ya nos juzgó, se nos acusó, y ya hasta somos culpables.” Refirió que hay dos servidoras de la Secretaría de Educación Pública (SEP ) que fueron cesadas de sus funciones.
La semana pasada, el Secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Meyer, ordenó cancelar de manera definitiva las actividades del colegio y solicitó al gobierno de la Ciudad de México que clausure el inmueble en el que operaba el Montessori Matatena, ubicado en la Extremadura Insurgentes, mismo que fue cerrado desde el pasado 17 de abril luego de que los padres de cinco menores de edad que asistían a este kínder denunciaron a Duarte Pereda por agresiones que iban de golpes, tocamientos genitales y sexo oral.
A esta denuncia se sumó el padre de un niño con Síndrome de Down. Además, trascendió que el año pasado los padres de un menor decidieron sacarlo de esa escuela por el abuso que había sufrido por parte del «Tío Rafa», como ubican todas las víctimas a Duarte Pereda.