El América llega con cinco triunfos en sus últimos seis encuentros para una cosecha de 22 puntos, con lo que se ubica segundo de la clasificación a falta de siete fechas en el calendario regular.
Por Carlos Rodríguez
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de marzo (AP) — Si alguna lección aprendió América la última vez que enfrentó a Chivas es que el favoritismo se diluye en un clásico.
Más de tres meses después de que el Guadalajara dejó fuera a las Águilas por los cuartos de final del torneo anterior, los dos equipos más populares del país se vuelven a ver las caras el fin de semana en el partido más trascendental de la undécima fecha del Clausura mexicano.
A finales de noviembre del año pasado, el América era amplio favorito en la serie ante un Chivas que había sorteado un repechaje, y que había cambiado de entrenador en pleno torneo. Pero la última palabra correspondió al cuadro tapatío al imponerse 3-1 para acceder a las semifinales, desoyendo los pronósticos.
La narrativa parece ser similar de cara a su enfrentamiento del próximo domingo en la cancha del estadio Akron, feudo de Chivas.
El América llega con cinco triunfos en sus últimos seis encuentros para una cosecha de 22 puntos, con lo que se ubica segundo de la clasificación a falta de siete fechas en el calendario regular.
“En un clásico todo cambia y no importa cómo llegues, sino quién haga lo mejor el día del partido”, dijo el delantero de las Águilas, Henry Martín. “No podemos pensar en que somos favoritos. El fútbol es de resultados y nosotros estamos dando los resultados».
Chivas es la otra cara de la moneda.
A pesar de que la dirigencia mantuvo casi intacto la plantilla y mantuvo al entrenador Víctor Manuel Vucetich, el equipo ha sido inconsistente. Apenas ha podido ganar en uno de sus últimos cinco partidos y figura noveno con 12 puntos.
“No salvamos el torneo, pero ganándole al América cumplimos uno de los objetivos, que es sacar tres puntos y con esos tres puntos gano mucho más», dijo el zaguero de Chivas, Antonio Briseño. “Gano confianza, le quito tres puntos a uno de los rivales que no quiero que gane nunca y estaría más apretada la tabla”.
“No les gustaría perder y a nosotros menos. Es un partido muy importante para ambas escuadras”, añadió Briseño.
Además de vencer a su odiado rival, América requiere el triunfo pensando en alcanzar al líder Cruz Azul.
La Máquina tendrá una dura prueba a su racha de ocho triunfos consecutivos cuando reciba al Monterrey el sábado por la noche.
“Las ocho victorias son anecdóticas porque luego en mayo sufrimos en la liguilla y es lo que nos quita el sueño”, dijo el entrenador peruano de Cruz Azul, Juan Reynoso, en su primer torneo con los celestes.
Los ocho triunfos en fila de Cruz Azul le han dado 24 puntos. Están a dos victorias de igualar la marca del equipo, impuesta en la temporada 1971-72 y a cuatro del récord de la Liga Mx impuesto por León en el Clausura 2019.
Monterrey, la plantilla más cara en el fútbol local, tiene 19 puntos y es tercero.
En otros encuentros: Puebla-Atlas, Tigres-Mazatlán, Tijuana-Santos, Toluca-Pachuca, Querétaro-San Luis y León-Necaxa.