En una carta dirigida a la jefa de la diplomacia europea y al responsable de la delegación de la UE en Honduras les piden una investigación para buscar esclarecer lo sucedido con Cáceres.
Bruselas, 11 mar (EFE).- 36 eurodiputados del Grupo de la Izquierda Unitaria Europea e Izquierda Verde Nórdica exigieron hoy a la Unión Europea (UE) que garanticen que Gustavo Castro, único testigo del asesinato en Honduras de la activista de derechos humanos Berta Cáceres, pueda regresar a México en condiciones seguras.
En una carta dirigida a la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, y al responsable de la delegación de la UE en Honduras, Ketil Karlsen, les piden además una investigación independiente a nivel internacional para buscar a los culpables y esclarecer lo sucedido con Cáceres.
La iniciativa parte del eurodiputado de Izquierda Unida (IU) Javier Couso, que, junto a la portavoz de Izquierda Plural en el Parlamento Europeo (PE), Marina Albiol, ya habían enviado la semana pasada una petición a Karlsen para que asegurara la protección de Castro, informó esta formación en un comunicado.
Los eurodiputados indican que el secretario general de la organización Otros Mundos Chiapas esta «retenido» en el país centroamericano a petición de la Justicia y está bajo supervisión de la embajada de México.
Hasta el momento se le ha impedido regresar a su casa, pero la carta de los eurodiputados se suma al llamamiento tanto del Gobierno mexicano como de la ONU para que se permita a Castro salir de Honduras.
Los europarlamentarios se refieren a las directrices de la UE sobre activistas de los derechos humanos para solicitar a Mogherini y a la representación de la UE en Honduras que «pongan en marcha, con carácter de urgencia, todas las medidas que estén en su mano para proteger a Gustavo Castro».
También piden que intercedan ante las autoridades hondureñas «para asegurar su regreso a casa de forma segura, tal y como ha pedido el propio testigo«.
Asimismo, piden a ambos que posibiliten «una investigación internacional de las circunstancias del asesinato de Berta Cáceres lo antes posible».
Berta Cáceres era coordinadora general del Copinh, defensora de derechos humanos y líder de la etnia lenca, que vive en el occidente de Honduras.
Fue asesinada en la madrugada del 3 de marzo, pese a tener medidas cautelares y sus múltiples denuncias de que ella y su familia recibían con frecuencia amenazas de muerte.
«No sólo queremos una investigación independiente que castigue a los culpables, sino que exigimos que este escándalo no se repita con el testigo del hecho, Gustavo Castro, que está intentando regresar a su país al temer por su vida y que ya ha denunciado la alteración de la escena del crimen y presiones diversas», dijo Couso.
Éste espera que «la representación diplomática de la UE en Honduras preste la máxima disposición para interesarse por esta situación».
«En nuestra intención está la denuncia ante la tolerancia con una situación de violencia extrema contra periodistas, activistas y sindicalistas a partir del golpe de estado al presidente Manuel Zelaya», añadió Couso.
A su juicio, «es odiosa la comparación de la actitud de la UE, la comunidad internacional o la agenda informativa que obvia la situación en Honduras mientras carga de manera desproporcionada con otros países que no comparten su agenda política».