«Mira, voy a empezar diciendo lo siguiente, y no es una frase cualquiera, es la verdad: nunca me hizo nada. Nunca le vi hacer nada», afirmó Macaulay en entrevista sobre Michael Jackson.
Por Pedro J. Gutiérrez
Estados Unidos, 11 febrero (Vanguardia).- El supuesto gusto de Michael Jackson por los niños nunca deja de ser noticia. Su aparente pedofilia ha sido desmentida incluso por niños que en su momento lo acusaron de abusar sexualmente de ellos, porque aclarraron que fueron presionados por sus papás para sacerle dinero al cantante.
Por otro lado hay varios chicos que se dicen víctimas del cantante, pues con engaños, aseguran, los llevó a su rancho, durmió con ellos y los abusó sexualmente. Estas víctimas hicieron un documental que se viralizó porque justo mostraba las experiencias de estos chicos que contaron como fue su niñez al lado del cantante.
El documental se tituló Leaving Neverland, centrado en las experiencias de Wade Robson y James Safechuck y ha generado gran controversia desde su estreno.
Pero quien ahora dio la nota, fue un amigo íntimo del cantante, un pequeño que vivió muy de cerca del cantante y quien asegura todo se trató de una entrañable amistad y jamás hubo algún tipo de abuso, algo que Culkin testificó en su momento cuando Michael fue acusado de pedofilia.
Macaulay ofreció una entrevista a la revista Esquire, además se dejó fotografias, algo que regularmente no hace y además respondió preguntas directas de su trato con el cantante y de si alguna vez trató de aprovecharse de la amistad y de que practicamente vivían juntos en el famoso rancho de Michael que estaba convertido en un enorme parque de diversiones.
Cuando las preguntas fueron en ese sentido, Culkin fue enfático y de nueva cuenta salió en defensa de uno de sus mejores amigos: «Mira, voy a empezar diciendo lo siguiente, y no es una frase cualquiera, es la verdad: nunca me hizo nada. Nunca le vi hacer nada», afirmó Macaulay. «No tengo ninguna razón para callarme, especialmente en este punto en el que nos encontramos. El hombre ya no está entre nosotros.
Y en cualquier caso, no voy a decir que quedaría bien ni nada parecido, pero sí es cierto que ahora sería un buen momento para hablar. Si tuviera algo que decir, lo haría, pero no lo tengo. Nunca vi nada. Nunca hizo nada».
Además contó una anécdota que involucra al famoso James Franco y que resume el poco tacto con el que la gente se le acerca para cuestionar e indagar en la vida de lo que para él es un amigo que ya no está aquí y no se puede defender:
«Me crucé con James Franco en un avión. Nos habíamos visto dos o tres veces a lo largo de los años. Lo saludé con un gesto mientras poníamos las maletas en los compartimentos de cabina. ¿Qué tal estás? Bien, ¿tú? Lo típico… Fue justo después de que saliera a la luz Leaving Neverland y él me dijo: ‘Vaya con el documental’. Eso fue todo. Yo le respondí: ‘Ajá’, y me quedé en silencio. Él siguió insistiendo: ‘¿Qué te pareció lo que cuenta?’. Me di la vuelta y le dije: ‘¿A ti te apetecería hablar ahora mismo de tus amigos muertos?’. Me contestó tímidamente que no, y entonces le dije que había estado bien verlo y me fui», recordó.
