El FBI emitió al menos un boletín —van dirigidos a las agencias policiales de todo el país— antes de los disturbios de la semana pasada. El 29 de diciembre advirtió sobre la posibilidad de que manifestantes armados irrumpieran en legislaturas, dijo el segundo funcionario.
WASHINGTON (AP/EFE) — El FBI ha advertido que hay planes de protestas de personas armadas en las capitales de los 50 estados y en Washington en los días previos a la investidura del Presidente electo Joe Biden, lo que aviva los temores de más derramamiento de sangre después de la irrupción al Capitolio la semana pasada.
A través de un boletín interno, el FBI advirtió que podrían registrarse marchas en todo el país a partir del fin de semana y extenderse hasta la toma de protesta de Biden el 20 de enero, de acuerdo con dos funcionarios del orden público que leyeron detalles del memo a The Associated Press. Los investigadores creen que algunos de los manifestantes son integrantes de grupos extremistas, de acuerdo con los funcionarios. La cadena ABC fue la primera en reportar el boletín.
“Protestas armadas están siendo planeadas en los 50 capitolios estatales del 16 de enero hasta al menos el 20 de enero, y en el Capitolio federal del 17 de enero hasta el 20 de enero”, se lee en el boletín, de acuerdo con uno de los funcionarios. Ambos hablaron con la AP bajo condición de anonimato dado que no tenían autorización para abordar el asunto públicamente.
La circular detalla que han recibido «información sobre un grupo armado sin identificar que tiene la intención de viajar a Washington DC el 16 de enero. Han advertido que si el Congreso intenta sacar al presidente (Trump) por la vía de enmienda 25 ocurrirá un gran levantamiento».
Este procedimiento para inhabilitar al presidente puede ser realizado por el gabinete del Ejecutivo y el vicepresidente, Mike Pence, algo que la líder de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ha pedido que se invoque inmediatamente o el Legislativo recurrirá a un proceso de juicio político («impeachment»).
El FBI emitió al menos un boletín —van dirigidos a las agencias policiales de todo el país— antes de los disturbios de la semana pasada. El 29 de diciembre advirtió sobre la posibilidad de que manifestantes armados irrumpieran en legislaturas, dijo el segundo funcionario.
El general del Ejército Daniel Hokanson, jefe de la Agencia de la Guardia Nacional, dijo el lunes a los reporteros que la Guardia también está vigilando en todo el país.
“Nos mantenemos atentos en todo el país a fin de garantizar que estamos monitoreando, y que nuestra Guardia en todos los estados mantiene una estrecha coordinación con sus agencias locales de policía para brindar cualquier apoyo solicitado”.
Los disturbios sucedieron luego de llamados por internet a cometer actos de violencia en Washington para los últimos días de la presidencia de Donald Trump.
Un tuit en el que Trump prometió que el evento del pasado miércoles “será una locura” avivó un “frenesí de todo un mes de provocaciones, formulación de estrategias y adopción de la violencia contra los legisladores”, de acuerdo con un grupo de investigación que rastrea la actividad de extremismo en línea. En un informe emitido el sábado, el Grupo de Inteligencia SITE también advirtió que el ataque al Capitolio ha envalentonado a extremistas partidarios de Trump.
El aviso se da después de que el pasado día 6, el día en que se iba a certificar la victoria electoral del demócrata Joe Biden, un turba violenta asaltó por la fuerza el Capitolio instigada por Trump, que poco antes animó a sus seguidores a marchar al Congreso en un acto frente a la Casa Blanca.
Una de las manifestantes falleció de un tiro en el cuello y tres más sucumbieron a heridas o problemas médicos durante el asalto, mientras que un policía del Capitolio también murió debido a heridas ocasionadas en los forcejeos y otro se suicidó pocos días después.
El asalto puso en evidencia la poca preparación policial ante la protestas de trumpistas, que muchos han anunciado que repetirán en foros radicales en internet o en servicios de mensajería como Telegram.
Muchas de estas organizaciones y grupos han visto reducidos sus canales de información digital con la prohibición de personalidades radicales en Twitter y Facebook, así como las cuentas de Trump, para limitar nuevos estallidos de violencia.
Hasta su cierre poco después de la media noche del domingo, en Parler, una red social preferida por los ultraderechistas, se anunciaban varias concentraciones «pacíficas», pero con armas, en las capitales de los estados de todo el país, así como en Washington, donde se esperan más de 10.000 efectivos de la Guardia Nacional desde el sábado y hasta el día de la investidura de Biden, el día 20.