Ciudad de México, 17 de junio (SinEmbargo).– Después de que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) demostró que no necesita del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para discutir las leyes secundarias en materia energética, la izquierda afina su estrategia hacia 2015, el año donde planean jugarse sus últimas cartas para echar abajo el “mayoriteo” del Congreso de la Unión.
Tanto el Sol Azteca como el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) promueven la Consulta Popular para las elecciones del próximo año, como la opción para que el pueblo mexicano decida sobre los cambios constitucionales realizados en diciembre de 2013 en materia de hidrocarburos y electricidad.
Pero ambas fuerzas políticas están conscientes de que el PRI hará todo lo posible para impedir que la consulta se realice y continuar imponiendo su voluntad a los opositores de la reforma.
“La correlación de fuerzas en las cámaras es desventajosa para la izquierda. Yo soy de la idea de que hay que agotar todas las formas de lucha, no nada más la votación como lo ha dicho Miguel Barbosa [Huerta], él dice que no habrá toma de tribunas y nos deja como último recurso la votación y ya sabemos cual será el resultado. La Consulta Popular es la última carta para revertir sí, pero habrá muchas trabas para que se concrete. El PRI tratará por todos los medios de detenerla”, dijo Armando Contreras Luna, secretario de alianzas del PRD.
Por su parte, Bertha Elena Luján, secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena, explicó que la Consulta Popular no es la única carta que la izquierda tiene bajo la manga para echar atrás la Reforma Energética.
“Evidentemente estamos volcados a lo de la campaña de las firmas, porque tenemos el tiempo reducido, la mayor parte de los brigadistas están en eso. Pero nosotros sabemos que incluso con las firmas, será muy difícil que nos hagan caso, nos pueden sacar cualquier pretexto, van a decir que la pregunta no es pertinente, no podemos pensar que sólo con la consulta, sino tenemos que pensar en un congreso popular que saque a esos traidores de ahí”, dijo Luján.
La secretaria general del movimiento que lidera Andrés Manuel López Obrador dijo en 2015 se elegirán diputados federales y que esa es también una oportunidad para dar marcha atrás a las reformas constitucionales de Peña Nieto.
“Que se cambie la correlación de fuerzas en el Congreso, al menos en 2015 vamos a empezar por los diputados. Tenemos que ganar puestos para sacar a esos traidores”, dijo.
POR LA CONSULTA POPULAR
Contreras Luna detalló que el ejercicio de la consulta tendrá que pasar por varios filtros: una de ellos será la “revisión con lupa” de cada una de las firmas y después, la constitucionalidad de la misma.
Ambas solicitudes no deberán coincidir en más de 20 por ciento de las firmas. Si la consulta logra realizarse y se determina que es constitucional, 40 por ciento de los electores de 2015, deberán participar en el ejercicio para que sea vinculante.
Debido a esta serie de trabas, tanto el PRD como Morena realizan una campaña intensa de promoción, sin embargo, tampoco es suficiente, dijo Contreras.
A los filtros “naturales” que los priistas le pondrán a la consulta, se le suma la división de la izquierda.
“Como cada partido va por su lado, en realidad Morena quiere juntar dos millones y nosotros dos millones, pero es un problema la falta de sensibilidad de Morena y del PRD de decir no vamos juntos. Entre los dos se juntarán cuatro millones de firmas, se duplicarán y todo se va a complicar. No sé ve que Morena quiera ir en un futuro con nosotros, así que divididos, será muy complicado”, dijo Contreras.
El secretario de alianzas del Sol Azteca indicó que el partido debería apostar también por la movilización en las calles. La semana pasada todo parecía indicar que los perredistas saldrían a protestar en contra de la aprobación de la leyes secundarias de la Reforma Energética pero hoy “el mensaje es otro”, aseguró Contreras.
Los perredistas no están pesando en salir a protestar y están dando “por perdida” la discusión en el Congreso de la Unión.
“Hay mensajes en sentido contrario, para que no se movilice la gente y para que la reforma se decida a través de los votos. Es importante empujar la consulta, pero también con la movilización de la gente en las calles”, agregó.
MOVIMIENTOS SEPARADOS
A diferencia del PRD, Morena inició el viernes con una serie de brigadas en todo el país para recabar las firmas que se necesitan para solicitar la consulta.
El viernes pasado salieron alrededor de cinco mil brigadistas, fueron casa por casa y se manifestaron en los congresos locales, explicó Bertha Elena Luján, secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena.
La secretaria general del movimiento que lidera Andrés Manuel López Obrador explicó que su líder ya inició desde hace dos semanas a “destapar” candidatos en todo el país para diputaciones, asambleístas y gobernadores.
Bertha Luján explicó que además de la consulta popular, la última carta, será ganarle puestos de representación popular a la derecha y continuar con la movilización de la población.