Steve Ludwin lleva más de 30 años inyectándose veneno de serpiente, una práctica dolorosa y peligrosa pero que para el cantante favorece su salud.
Por ejemplo, el músico de punk rock oriundo de Estados Unidos sostiene que no ha sufrido de gripe en los últimos 15 años gracias a estas inyecciones.
Ciudad de México, 10 de noviembre (RT/SinEmbargo).- Un músico residente en Londres (Reino Unido) lleva 30 años inyectándose veneno de serpiente, un hábito que casi le ha costado la vida pero que podría salvar a miles.
«Lo que hago parece una locura, pero resulta que esta práctica tiene efectos positivos para la salud», dijo a AFP Steve Ludwin, de 51 años.
El músico de punk rock oriundo de Estados Unidos sostiene que no se ha acatarrado en los últimos 15 años gracias a las inyecciones.
Al mismo tiempo, esta práctica es dolorosa y peligrosa: una vez Ludwin fue ingresado en cuidados intensivos, donde pasó 3 días tras una sobredosis de veneno.
En las últimas décadas probó venenos de una cantidad de reptiles muy peligrosos, incluida la cobra y la mamba negra, y no recomienda repetir sus experimentos.
Hace varios años el insólito hábito de Ludwin llamó la atención científica, y los investigadores de la Universidad de Copenhague se dedicaron al desarrollo de un antídoto basado en los anticuerpos de la sangre del músico.
«Cuando se inyecta veneno, su sistema inmune responde. Esperamos encontrar copias de sus anticuerpos, aislarlas, ponerlas a prueba y ponerlas en producción», comentó Brian Lohse, profesor de la Facultad de Sanidad y Ciencias Médicas de la universidad.
Se espera que el proyecto iniciado en el 2013 finalice en el curso de un año. De tener éxito, será la primera vacuna de este tipo elaborada con la ayuda de un donante humano.