El actor Jeremy Piven quien suma tres acusaciones de agresión sexual en su contra, desmiente los hechos, y afirma que son inventadas.
Los Ángeles, 10 de noviembre (EFE).- El actor estadounidense Jeremy Piven, que en los últimos días ha sido señalado por tres mujeres por diferentes casos de agresión sexual, negó hoy estas acusaciones en su contra y las calificó de «absolutamente falsas y completamente inventadas».
Esta respuesta del actor que alcanzó la fama por la serie Entorauge llega el mismo día en el que la publicista Tiffany Bacon Scourby asegurara que Piven abusó de ella en 2003 en Nueva York.
«Se abalanzó sobre mí. Intenté quitármelo de encima pero me empujó hasta el suelo», dijo Scourby, quien explicó que a continuación Piven se desnudó y restregó sus genitales contra ella.
Según su relato, el actor eyaculó sobre su jersey tras quince minutos en los que ella se mantuvo vestida.
Scourby es la tercera mujer que alega abusos por parte de Piven en los últimos días, después de que anteriormente lo hicieran las actrices Ariane Bellamar y Cassidy Freeman.
El actor, que en varias ocasiones había rechazado estas acusaciones, publicó hoy un largo comunicado en su cuenta de Twitter negando de nuevo esos comportamientos.
«Déjenme empezar diciendo que las acusaciones en contra de mí son absolutamente falsas y completamente inventadas», aseguró.
El actor dijo que nunca abusaría de una mujer y que está dispuesto a someterse a una prueba de polígrafo para demostrar su inocencia.
Piven dijo sentir compasión por las víctimas de ese tipo de agresiones y lamentó que las falsas acusaciones en su contra puedan menoscabar esas «historias que deberían ser escuchadas».
«Parece que estamos entrando en tiempos oscuros. Se están publicando acusaciones como hechos y las vidas se están poniendo en peligro sin una audiencia, un debido proceso o pruebas. Espero que podamos dar a la gente el beneficio de la duda antes de apresurarnos a juzgar», indicó.
Piven concluyó su escrito diciendo que destruir carreras en función sólo de acusaciones «no es productivo en ningún nivel» y confió en que se pueda establecer un «diálogo constructivo» acerca de estos temas «que son reales y deben ser abordados».