Apenas, el pasado 14 de octubre el Leonard Cohen se retractó de haber dicho que «estaba preparado para morir» y aseguró que tenía «pensado quedarme hasta que tenga ciento veinte años». Recién había cumplido los 82 años, el 21 de septiembre. Será recordado aparte de se música por su voz cavernosa, traje oscuro y elegancia.
Ciudad de México, 10 de noviembre (SinEmbargo/EFE).- El cantante, poeta y escritor Leonard Cohen falleció este día a la edad de 82 años, aunque no se informó del lugar ni de las causas de la muerte.
De acuerdo con un mensaje en su página oficial de Facebook se hará un homenaje en Los Ángeles y su familia pidió privacidad en este «momento de dolor»:
«Con profunda tristeza informamos que legendario poeta, compositor y artista, Leonard Cohen ha fallecido.
Hemos perdido a uno de los músicos más venerados y prolíficos visionarios.
Un homenajese hará en Los Ángeles posteriormente. La familia ha pedido privacidad durante este momento de dolor».
Apenas, el pasado 14 de octubre el poeta se retractó de haber dicho que «estaba preparado para morir» y aseguró que tenía «pensado quedarme hasta que tenga ciento veinte años». Recién había cumplido los 82 años, el 21 de septiembre.
En un encuentro con los medios en Los Ángeles a propósito de su nuevo disco, «You Want It Darker», despejó de un plumazo aquellas voces que anunciaban su final.
«Dije recientemente que estaba preparado para morir y creo que estaba exagerando […]. Tengo la intención de vivir para siempre», afirmó con ironía el legendario músico en un acto celebrado en la residencia del cónsul canadiense en la ciudad californiana.
Con su voz cavernosa, traje oscuro, camisa gris y elegancia hasta en el gesto más pequeño, Cohen dedicó en aquella ocasión unas cariñosas palabras a Bob Dylan, flamante premio Nobel de Literatura y con quien comparte el lugar más alto en la admirada lista de cantautores que surgieron en los años 60.
«Para mí, (que Dylan vaya a recibir el Nobel) es como poner una medalla al monte Everest por ser la montaña más alta (del mundo)», aseguró Cohen con rotundidad.
«You Want It Darker» salió a la venta apenas pasado el 21 de octubre.
No es de extrañar que muchos medios señalaran el álbum como una despedida de lujo para Cohen porque las imágenes de meditación, de echar la vista atrás y de balance espiritual son constantes a lo largo de «You Want It Darker».
Y, como si quisiera de nuevo certificar por completo que esto no es un adiós, concluyó: «Gracias por venir, amigos. Realmente lo agradezco. Y espero que podamos hacer esto de nuevo. Tengo pensado quedarme hasta que tenga ciento veinte años», dijo en aquella ocasión el nacido en una familia de emigrantes judíos que se asentaron en Canadá.
Además de escribir diez poemarios y dos novelas, fue autor de canciones exitosas como la inmortal «Suzanne», en las que narraba tanto las miserias como la grandeza de la condición humana con esa voz tan personal, entre grave, rota y enigmática, propia del llamado «trovador de voz cavernosa».
Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2011 y candidato al Nobel de Literatura en varias ocasiones.
Allí se licenció en Literatura en la Universidad McGill en 1955 y formó parte de un grupo musical de aficionados, The Buckskin Boys, dedicado al country.
Se trasladó a Nueva York con una beca para la Columbia Graduate School, y a los 24 años recibió otra, del Canada Council, para escribir un libro, lo que le permitió viajar a Europa.
Cohen siempre compaginó la música con la literatura, su gran pasión, que comenzó a los 16 años cuando escribió sus primeros poemas.
Aún no terminada la carrera apareció su primer poemario, «Comparemos mitologías»(1956), inspirado en García Lorca, su poeta predilecto, al que siguió «La caja de especias de la tierra» (1961).
En la década de 1960 se instaló en la isla griega de Hydra, donde empezó a componer canciones, y vivió siete años entre Europa y América.
En 1963 publicó su primera novela, «El juego favorito», a la que siguió el tercer poemario «Flores para Hitler» (1964), su segunda novela «Los hermosos vencidos»(1966) y el cuarto poemario «Parásitos del cielo» (1966).
Su obra poética se completa con títulos como «La energía de los esclavos»(1972), «Memorias de un mujeriego»(1978), «Libro de la misericordia»(1984) o «El libro del anhelo»(2006).
En 1966 retornó a América, y fue entonces cuando entró en el mundo de la música junto al cantante Judy Collins, quien grabaría dos de sus canciones más conocidas, «Suzanne» y «Dress rehearsal Rag».
Al año siguiente se presentó en público, fichó con Columbia y lanzó su primer álbum, «Canciones de Leonard Cohen», al que siguió en 1969 el exitoso «Songs from a room» y en 1971, con «Songs of love and hate», se confirmó como uno de los grandes autores.
Durante los años setenta sacó al mercado «Live songs» (1973), «New skin for the old ceremony»(1974), «Death of ladies man» (1977) y «Recent songs»(1979), y en los ochenta, «Various positions» (1984) y «I’m your man» (1988).
Tras cuatro años de silencio, en los noventa publicó «The future» (1992) y «Stranger music» (1993).
De carácter taciturno e introvertido, Cohen sufrió en varias ocasiones períodos de depresión, de los que salió gracias a la filosofía zen. Incluso estuvo retirado seis años en un monasterio de California, y hasta se convirtió en monje, en 1996, con el nombre de Jikan, «silencio».
Aun así, en esa época dejó dos álbumes de directos, «Cohen live» (1994) y el recopilatorio «More best of» (1997).
Durante estos años de meditación escribió cientos de poemas y canciones por lo que al salir del monasterio en 1999 preparó su siguiente disco de estudio, «Diez nuevas canciones» (2001).
Tras publicar además un recopilatorio de conciertos y la colección «The Essential», con sus 31 clásicos, en 2004 salió «Dear Heather», un nuevo disco con el que celebró sus 70 años. Cinco años después, en julio de 2009 durante una gira por España, tuvo que suspender uno de sus concierto al sufrir un desmayo en el escenario.
En 2012, y tras ocho años sin sacar un disco de estudio, publicó «Old ideas», que supuso su renacimiento musical pero cuya causa Cohen no ocultó: estaba totalmente arruinado tras la negligente gestión de su exrepresentante y amiga Kelley Lynch.
Lynch durante mucho tiempo estuvo desviando dinero del artista, del que llegó a vender hasta los derechos de autor sin su conocimiento.
El éxito de «Old ideas» fue tremendo y llegó a ser número uno en las listas de los discos más vendidos en Europa y EEUU.
Dos años después, y coincidiendo con su 80 cumpleaños, Cohen sacó su siguiente disco de estudio, «Popular Problems» (2014), donde retornó al blues, haciendo gala de su enorme creatividad.
El primer sencillo, «Almost like the blues», refleja ese toque entre marginalidad y espiritualidad tan suyo.