Un agente de la Patrulla Fronteriza de EU ayudó al Cártel del Golfo a decapitar a un inmigrante hondureño, cuyo cuerpo fue arrojado en la costa de la Isla del Padre, al sur de Texas.
Ciudad de México, 10 de noviembre (SinEmbargo).- Un agente de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, llamado Joel Luna Rodríguez, enfrenta cargos de asesinato en conexión con lo que las autoridades dicen que fue una ejecución relacionada con el Cártel del Golfo, que dejó un cuerpo decapitado este año, flotando en la costa de la Isla del Padre, al sur de Texas.
El agente de 30 años de edad, fue asignado a la estación de Hebbronville, a unos 265 kilómetros al noroeste de la isla, y había trabajado para la agencia durante seis años. Sin embargo, fue colocado en licencia administrativa después de su detención la semana pasada, dijeron las autoridades.
Luna está acusado de asesinato capital, posesión de una sustancia controlada, participación en actividad delictiva organizada y manipulación de pruebas en la muerte de José Francisco Rodríguez Palacios Paz, de 33 años, un inmigrante hondureño, dice una nota publicada en Los Ángeles Times.
El pasado 16 de marzo, un grupo de pescadores encontró el cuerpo mutilado de Paz, flotando a unos 450 metros del popular destino de vacaciones, de acuerdo con un comunicado difundido por el Sheriff del Condado de Cameron, Gus Reyna Jr.
Paz había estado trabajando en una tienda de neumáticos en Edinburg, a unos 1,287 kilómetros al oeste de la isla, en el Valle del Río Grande. Reyna dijo que los investigadores arrestaron a tres hombres en la zona en junio, en relación con el asesinato. Estos fueron: Aarón Rodríguez Medellín, de 22; Néstor Manuel Leal, de 18 años; y uno de los hermanos de Luna, Eduardo Luna Rodríguez, de 24 años de edad.
Un cuarto hombre, otro de los hermanos de Luna -Fernando Luna Rodríguez, de 35 años- fue detenido en un cruce fronterizo en el mismo día que regresó de México con el agente ahora involucrado.
Luna no fue acusado hasta el pasado jueves, cuando un equipo de investigadores federales, estatales y locales lo buscaron en la casa de su suegra en el Valle del Río Grande, y encontraron una caja de seguridad de acero.
Entre la evidencia incautada de la caja fuerte, se encontró más de un kilo de cocaína, 17 gramos de metanfetaminas, una pistola calibre 22, alrededor de 90 mil dólares en efectivo y la insignia que utilizaba Luna en la Patrulla Fronteriza, además de documentos de identificación, dijo Reyna, que además agregó que los investigadores «desarrollarán más información que corrobora que el asesinato se asoció con el cártel del Golfo».
De acuerdo con Breitbart, el cártel del Golfo tiene una operación de tráfico de drogas masiva, internacional, al otro lado de la frontera de la sede del Condado de Cameron, Brownsville: en Matamoros, Tamaulipas.
Los Ángeles Times indica que la seguridad del estado tamaulipeco se ha «deteriorado en los últimos meses, con secuestros y tiroteos en las calles entre los combatientes de cárteles y policías estatales».
También recuerda que el mes pasado, la Alcaldesa de Matamoros, Norma Leticia Salazar Vázquez, advirtió a los residentes a permanecer en el interior de sus casas, después de que varios tiroteos estallaron a raíz de la captura de un líder del Cártel del Golfo.
El Sheriff del Condado de Cameron dijo que la investigación indica que Luna era «un participante en la posesión y distribución de sustancias controladas», así como del asesinato del inmigrante hodureño.
Luna, sus dos hermanos, y los otros dos sospechosos, fueron detenidos sin derecho a fianza en la cárcel del Condado de Cameron, el pasado lunes. De acuerdo con lo informado por LA Times, fuentes gubernamentales de EU les dijeron que las autoridades mexicanas estaban cooperando con los investigadores del caso.
«La inmensa mayoría de los funcionarios y agentes [de la Patrulla Fronteriza] ejercerán sus funciones con honor y distinción, trabajando incansablemente todos los días para mantener seguro a nuestro país», dijo la agencia a través de un comunicado. «No toleramos la corrupción o el abuso dentro de nuestras filas, y cooperamos plenamente con cualquier investigación penal o administrativa de presunta mala conducta de cualquiera de nuestro personal, dentro o fuera de servicio».
