La temperatura más alta se registró en 49.5 grados Celsius en Lytton, pequeña localidad a 250 kilómetros al noreste de Vancouver.
Francia, 10 de julio (RadioFranciaInternacional).- Un domo de calor o una cúpula de calor, es el fenómeno que están aún sufriendo las regiones occidentales de Canadá y Estados Unidos. Un calor asfixiante que se queda atrapado por frentes de alta presión y se calienta aún más al caer hacia el suelo. El resultado han sido temperaturas extremas nunca antes vistas en esta región del hemisferio norte. RFI conversó con un oceanógrafo sobre este fenómeno meteorológico.
Temperaturas en el noroccidente de Norteamérica nunca antes vistas.
En Lytton, pequeña localidad a 250 kilómetros al noreste de Vancouver, la temperatura registró 49.5 grados Celsius. Días después el pequeño poblado fue arrasado por un incendio. En el estado de Oregon, en Estados Unidos también se registraron temperaturas muy altas.
Más de 700 personas han fallecido por las altas temperaturas y otras miles debieron abandonar sus casas debido a los numerosos incendios en la región canadiense de Columbia Británica pero también mucho más al sur en California.
Esta cúpula de calor, que es como una tapa sobre una olla, impide también que se formen nubes de vapor. El intenso calor provoca a su vez incendios debido a la aparición de piro cúmulos, una especie de nubes tormentosas que generan rayos, provocando focos incendiarios.
El oceanógrafo Rodney Martínez Güingla, representante de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para las Américas y el Caribe, explicó a Melissa Barra cómo se creó en esta región de Norteamérica esta cúpula de calor: “Normalmente en el hemisferio norte existe un Jetstream, una corriente de chorro, un flujo de vientos muy fuertes en la alta atmósfera que cruza todo el continente, del Pacífico al Atlántico, haciendo algunos giros…este Jetstream, que normalmente es una franja alargada y horizontal, ahora se ha vuelto ondulatorio, tiene una configuración curvilínea y justo esta configuración hace que en este caso, en una parte de Norteamérica, el noroccidente de Canadá y parte de la costa oeste de Estados Unidos (el aire caliente) se ha quedado atrapado en este Jetstream que ahora es una ondulación, que simula la letra omega ( Ω ), por eso se le dice bloqueo tipo omega…esta corriente de chorro ha envuelto al calor, todo el aire caliente se ha quedado atrapado”.
El climatólogo Christophe Cassou, explicó por su parte a RFI que aún no se sabe con qué frecuencia estos domos de calor tendrán lugar en un futuro: “Estos bloqueos atmosféricos pueden durar entre 7 y 15 días y pueden producirse en cualquier lugar…la canícula del 2003 en Francia estuvo asociada a este fenómeno… no sabemos con qué frecuencia se van a dar, pero lo que sí sabemos es que cuando se producen, el impacto es mucho mayor debido al cambio climático.”
Entrevistados: el oceanógrafo Rodney Martínez Güingla, representante de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para las Américas y el Caribe y el climatólogo Christophe Cassou, director de investigación del CNRS y uno de los principales autores del último informe del GIECC, Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático.