Ciudad de México, 10 de febrero (SinEmbargo).– En días recientes, dos panistas con una militancia de 17 y 21 años anunciaron su renuncia al Partido Acción Nacional (PAN), con el argumento de que el partido realiza contiendas internas de simulación, en donde los dados están cargados a favor de los integrantes de la cúpula dominante y se pretende realizar expulsiones masivas para beneficiar a líderes locales panistas.
La respuesta del líder nacional panista, Gustavo Madero Muñoz, a estas renuncias fue minimizar su alcance al decir que éstas responden más a intereses particulares que de partido.
Expertos en política consultados por SinEmbargo consideraron que si bien los personajes que recientemente renunciaron a Acción Nacional no tienen el peso suficiente para debitar al partido, sus razones para abandonar las filas del albiazul sí deberían ser motivo de preocupación para los que se quedan.
En otras palabras, si bien las renuncias del Diputado federal Jorge Sotomayor Chávez y del Diputado local Enrique Barrios Rodríguez no son tan preocupantes para el PAN como sí lo fue, por ejemplo, la renuncia de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano al Partido de la Revolución Democrática (PRD), los argumentos de quienes abandonan las filas panistas deberían poner focos de alerta en el partido.
Eduardo Bueno León, académico del Departamento de Ciencias Sociales y Políticas de la Universidad Iberoamericana, afirmó que el partido está pagando el precio de asumir una postura pragmática en donde la ética política ha quedado olvidada en el último cajón del armario.
“El PAN está sufriendo las consecuencias de un excesivo pragmatismo, el PAN se alejó de sus principios socialcristianos, se alejó de sus principios de sociedad comunitaria de los fundadores”, explicó el sociólogo y politólogo.
“[El PAN] se ha sumido cada vez más en una especie de neoliberalismo pragmático, sin mencionar que la ética pública se ha desdibujado en algunos de sus dirigentes”, destacó.
Por su parte, Salvador Mora Velázquez, profesor de carrera de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), detalló que las recientes renuncias no demuestran una debilidad estructural en el partido.
Sin embargo, mencionó que sí dejan entrever que al interior del PAN están cerrados los espacios de crecimiento político y profesional para aquellos que no pertenecen al grupo que controla la dirigencia nacional, los cuales son conocidos como maderistas, o afines al actual líder, Gustavo Madero Muñoz.
“A mi entender no es una crisis estructural del partido, el partido no se está desdibujando, habría que ver qué tanto el PAN está redefiniéndose ideológicamente y al mismo tiempo está buscando un nuevo espectro de influencia política en el ámbito electoral”, afirmó.
Por su parte, Sergio Bárcena, profesor del Departamento de Estudios Jurídicos y Sociales del Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México, consideró que las escisiones en el PAN, a diferencia del PRD, no son de integrantes de la cúpula partidista, ni se trata de liderazgos históricos.
“En el caso del PAN es distinto, allí se ve una nueva generación de panistas que algunos no han encontrado algún beneficio en los acomodos internos, se salen del partido, pero todavía mantiene cierta cohesión que parte de su dirigencia histórica o su cúpula de liderazgos”.
Explicó que existen tres razones fundamentales por las cuales Acción Nacional dejó de ser atractivo para las personas que pretenden afiliarse a un partido político: por las decisiones del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, una evolución natural del partido, que pasó de ser partido en el Gobierno a ser oposición, y un proceso generalizado de desafección a las organizaciones partidarias.
No obstante, los especialistas consideraron que eso no significa que el PAN sea un partido débil o destinado a desaparecer. Por el contrario, previeron que el blanquiazul se convertirá en un partido de alta intensidad en esta época electoral.
Aunque también mencionaron, que para ser mejor oferta política, Acción Nacional deberá atender las demandas de la ciudadanía y escuchar los reclamos de su militancia.
LAS RENUNCIAS
El Diputado federal Jorge Sotomayor Chávez rechazó la decisión del Comité Regional del PAN en el Distrito Federal que busca expulsar a más de seis mil “infiltrados” del padrón de militantes en la capital, sin que se tenga plena certeza de que en realidad podría tratarse de una maniobra para eliminar del padrón a “rivales” políticos de los líderes panistas en la capital.
Sotomayor envió una carta al presidente del PAN-DF, Mauricio Tabe Echartea, en la que expone que durante los últimos años el grupo político dominante en la capital, encabezado por Jorge Romo, Jefe Delegacional de Benito Juárez, en la Ciudad de México, ha fomentado la “descomposición” del partido por intereses particulares.
Criticó la intención del PAN capitalino por borrar de un plumazo la militancia de más de seis personas, las cuales han sido señaladas como integrantes de otras organizaciones políticas, principalmente del PRD. Estos “infiltrados” son los mismos que una fuente al interior del PAN reveló a SinEmbargo que se trataba de “un regalo envenenado” del Secretario de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano Cortés.
“Hace algunos días me dio la razón cuando decidió borrar a un buen número de personas del padrón. Hecho que el suscrito y otros tantos ya habíamos denunciado tiempo atrás”, se quejó el legislador federal.
“Queda en el aire la duda de si solamente eliminó del padrón a sus rivales”, destacó.
Mauricio Tabe respondió en una carta que la desafiliación no ha sido de forma discrecional, sino que se trata de un proceso de depuración avalado por los órganos institucionales.
“Miente al decir que esta dirigencia ha conducido con dolo los procesos de afiliación. Por el contrario, hemos tomado con muchísima responsabilidad el cuidado de nuestros padrones”.
No obstante, la duda quedó plasmada en momentos en que se pelean varios puestos de elección popular que estarán en juego en el proceso electoral del próximo 7 de junio.
Por su parte, el Diputado local del Congreso de Nuevo León, Enrique Barrios Rodríguez, renunció a su militancia de 21 años por considerar que es una simulación el proceso de precampañas en la entidad.
Acusó imposiciones del CEN del PAN en la contienda interna del partido para la selección de candidatos a Gobernador, alcaldías, diputados locales y federales.
Alegó que la dirigencia nacional del partido designaba a los candidatos afines al maderismo. Por lo que anunció que contenderá por la alcaldía de Monterrey bajo las siglas del Partido Humanista.
“La decisión es porque unos cuántos son los que manejan al partido, que tienen el apoyo de Gustavo Madero, líder nacional del PAN y fue en México en donde se repartieron las candidaturas como barajitas”, dijo.
RENUNCIAS SON NATURALES EN MOMENTOS ELECTORALES
Las renuncias de Jorge Sotomayor y de Enrique Barrios fueron analizados por expertos consultados por SinEmbargo quienes reconocieron que este tipo de escisiones en época electoral no son exclusivas de México o del PAN.
“Cuando los que intentan ser candidatos no tienen oportunidad en un partido se acercan a otros partidos o buscan una oportunidad por la vía independiente”, detalló el maestro Sergio Bárcena.
Para el doctor Eduardo Bueno, el PAN está sufriendo una paulatina renuncia de miembros que de alguna u otra manera han estado identificados con el Gobierno Felipe Calderón, o con otros liderazgos, pero cuyo común denominador es que no tienen afinidad o discrepan abiertamente con el estilo del presidente Gustavo Madero.
“Al quedarse marginados han comenzado a buscar otras opciones, en una especie de operación transfuguismo porque no encuentran espacios para seguir luchando por sus posiciones y entonces es inevitable que veamos renuncias y estas renuncias vendrán acompañadas de postulaciones con otros partidos”, detalló el académico.
El especialista Salvador Mora detalló que si bien el regreso de Gustavo Madero a la presidencia del partido trajo consigo una serie de prácticas que pretenden reconfigurar la imagen de albiazul más allá del calderonismo instalado durante el sexenio pasado, lo cierto es que muchas de sus decisiones están avaladas en los propios estatutos del partido.
Por lo que indicó que las recientes renuncias responden más a expectativas personales incumplidas, que a problemas sistemáticos en Acción Nacional.
“Estas salidas tenemos que verlas como parte de un proceso de pérdidas de expectativas personales de los actores políticos al interior de Acción Nacional”, dijo.
El maestro Sergio Bárcena explicó que el PAN apostó por un modelo moderno en donde los partidos políticos ya no dan importancia al registro de militantes permanentes, sino que buscan dirigencias sin tantas cargas burocráticas y solo apelan a sus afiliados en época de elecciones.
Detalló que en los partidos políticos modernos cerca del 10 por ciento de sus votantes son militantes, entonces, recalcó, si te pones a pensar los militantes no hacen en sí al partido, lo hacen los votos.
“Acción Nacional tiene una pérdida de militantes no es lo mismo que perder votos o simpatizantes”, apuntó el académico de la Ibero.