La decisión se da además un día después de que salieran a la luz documentos que muestran que empleados de Boeing levantaron sospechas respecto a la seguridad del 737 Max, al presuntamente tratar de ocultar problemas a los reguladores federales y ridiculizar a los responsables del diseño y la supervisión del avión de pasajeros.
WICHITA, Kansas, EU (AP) — Los problemas de Boeing y su desventurada aeronave 737 Max empeoran con el anuncio de un proveedor importante el viernes de que despedirá a más de 20 por ciento de su fuerza laboral en Kansas, donde tiene su sede.
El anuncio de Spirit AeroSystems de que despedirá a 2 mil 800 empleados es un golpe para Wichita, la ciudad más grande del estado donde la empresa es una importante fuente de trabajo.
La decisión se da además un día después de que salieran a la luz documentos que muestran que empleados de Boeing levantaron sospechas respecto a la seguridad del 737 Max, al presuntamente tratar de ocultar problemas a los reguladores federales y ridiculizar a los responsables del diseño y la supervisión del avión de pasajeros.
Los despidos amenazan con causar estragos en una economía que se ha mantenido sólida por meses, con bajo desempleo, y recaudaciones de impuestos superiores a las expectativas. La Gobernadora demócrata Laura Kelly y la Legislatura controlada por los republicanos han sido capaces de impulsar el gasto en las escuelas públicas y los servicios, y las malas noticias llegan tres días antes que los legisladores inicien su sesión anual.
Spirit AeroSystems es el mayor empleador en Wichita, que se autodenomina como la «Capital Aérea del Mundo» dada la enorme concentración de fabricantes del sector aeroespacial. Más de 40 compañías aeroespaciales, la mayoría de ellas instaladas en la región sur-centro de Kansas, brindan partes y servicios a la producción del 737 Max.
El Gobierno estatal había estado sopesando el uso de fondos para beneficios por desempleo para solventar parte de los salarios de los trabajadores de Spirit, con la intención de que pudieran mantener sus empleos.
Los trabajadores afectados dejarán de pertenecer a la compañía a partir del 22 de enero.