La población estudiantil afroestadounidense de la institución había pedido la renuncia de Wolfe tras quejarse de la desatención a lo que calificaron un “opresión sistémica” en el campus.

Asimismo, los jugadores de color del equipo universitario de fútbol americano anunciaron que no participarían en entrenamientos y partidos hasta que un estudiante termine la huelga de hambre que inició para protestar por el estado de las relaciones interraciales.

“Mi motivación para tomar esta decisión es resultado del amor, no del odio”, señaló el funcionario al anunciar su dimisión tras una reunión con el consejo directivo del centro universitario.

Wolf asumió la total responsabilidad por la “inacción” y pidió a la comunidad universitaria escucharse unos a otros y “dejar de intimidarse”.

Este lunes la plantilla de profesores llamó a un paro en solidaridad con las protestas estudiantiles. Se estima que la institución perdería alrededor de un millón de dólares por cada partido que el equipo de americano no juegue.

Las quejas contra Wolf incluían su falta de acción ante los reportes de hallazgos de suásticas pintadas con heces fecales en los baños de los dormitorios universitarios.

El descontento se acrecentó luego de que Wolf respondió a los alumnos en un cuestionamiento informal que “la opresión sistémica es porque ustedes no creen que tienen una oportunidad igualitaria para tener éxito”.

Tras el anuncio de la salida de Wolf, un grupo estudiantil afroestadounidense, incluido el alumno en huelga de hambre, apuntó que aún hay trabajo qué hacer en materia de trato igualitario entre la comunidad universitaria.