La Averu, que agrupa a casi 20 universidades del país, difundió un comunicado en el que rechaza «contundentemente el acuerdo emitido por la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) que pretende desconocer la situación actual de las universidades venezolanas y su intervención solapada en los asuntos internos universitarios».

Los rectores de las casas de estudio, que incluyen a las universidades Central de Venezuela (UCV), Simón Bolívar (USB) y Carabobo (UC), entre otras, se manifestaron así en contra de un acuerdo emitido el pasado 3 de noviembre por el Parlamento en el que se condena que no se hayan reiniciado las clases en varias de estas instituciones.

La AN, de mayoría oficialista, también pidió en ese acuerdo, que no fue respaldado por la bancada opositora, que se investigue a estas universidades, lo que es visto por las autoridades de las instituciones como una estrategia para intervenir estos espacios «autónomos» y de pensamiento plural.

La presidenta de la Averu y rectora de la UCV, Cecilia García Arocha, leyó el comunicado tras una reunión de los representantes de este organismo, respaldado por todas las autoridades de las universidades asociadas.

«La Averu se dirige al país (…) con el fin de rechazar categóricamente las falsas y graves acusaciones concernientes a la paralización de actividades académicas de las universidades públicas, la incesante persecución de las autoridades universitarias y el cerco presupuestario que aquejan al unísono a todas las casas de estudios superiores», dice el escrito.

Además, la Averu acordó «evidenciar la corresponsabilidad que tiene la Asamblea Nacional en la aprobación deficitaria del presupuesto asignado a las Universidades Públicas Nacionales, llevándolas prácticamente a una paralización técnica por insuficiencias».

El 23 de octubre pasado la Federación de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv) confirmó a Efe que los docentes de las universidades públicas asociadas a esta organización no se han incorporado a sus actividades, en protesta por los bajos salarios, presupuesto deficitario e intervención gubernamental.

Se trata, explicó la presidenta de la Fapuv, Lourdes Ramírez, de una protesta que consiste en un «no reinicio de clases», pues los docentes no se han reincorporado a las universidades después de las vacaciones colectivas de verano de las que debieron volver, algunos en septiembre y otros este mes.

Ramírez indicó que la protesta, más allá de tener que ver con el tema salarial, se asienta en defender a las universidades de una descomposición generalizada de las condiciones de funcionamiento que, aseguró, tiene que ver con las intenciones del Gobierno de intervenir estas casas de estudio.