Esta semana dio inicio formalmente el Proceso Electoral 2014-2015, los mexicanos estamos estrenando una nueva institución electoral con engranajes nuevos denominada INE, un monstruo de mil cabezas, que en un inicio en la propuestas académicas encontraba sustento y del cual me siento parte, pues en este espacio se había comentado sobre la necesidad de reformar la institución electoral en el país.
Desgraciadamente como todo, se reformó con prisa, se creó una institución que adoptó lo mejor del IFE pero también se llevó en la cola lo peor de él y peor aún nuestros legisladores y los dueños del país decidieron no entrarle a la disolución total de los Institutos Electorales, cumplieron una parte, sólo para taparle el “ojo al macho”, pero en realidad en los procesos de selección ahora de los consejeros que integran las OPLES no quedó muy claro y transparente como debería de ser, se dice que llegaron los más aptos, mis dudas tengo, queda en entredicho el sistema de selección del servicio profesional en México, esa idea perversa de pensar en que se filtran los exámenes a los “amigos”, ese idea más perversa aún de pensar que todo es legal , pero en las rondas de entrevistas se encuentra el amaño, o algo todavía más de mente cochambrosa el pensar que los partidos políticos a través de sus representantes una vez más ahora desde oficinas centrales en viaducto Tlalpan seleccionaron con cuotas y de acuerdo a sus propios intereses ahora no sólo los consejeros federales sino los locales también.
En estas elecciones se renovarán más de 2000 mil cargos, entre los que destacan las 500 curules de la Cámara de Diputados, 9 gubernaturas, diputados locales en 17 entidades del país, 993 alcaldías en 16 estados y 16 jefaturas en el Distrito Federal.
La guinda está muy alta, por primera vez en la historia moderna electoral se fusionarán los procesos electorales federales y locales en disputa, sin duda representa la prueba de fuego del INE. Máxime cuando se da este proceso electoral en un estado mexicano en el cual el aroma en las calles es a pólvora, el ambiente por el norte incita por un lado a la violencia y por el sur al miedo, estados fallidos o cuasi fallidos como Guerrero, Michoacán o Tamaulipas.
Qué futuro inmediato nos espera en la jornada electoral en estos estados y quizá en algún otro que se sume a esta ola de violencia que radica en el país, la cual intenta ser difuminada a toda costa por el gobierno, hace algunos años la violencia generada en el país era cosa de los llamados “daños colaterales” de la guerra contra el crimen organizado, miles de muertos y estadísticas ventiladas en todos los medios de comunicación, hoy no hay datos, hoy sigue habiendo muertos pero cada vez la descomposición social va a más y el apetito de poder del crimen organizado permea los sectores y cúpulas menos imaginables, hoy nos damos cuenta de que el crimen organizado está viviendo en las presidencias municipales, que financia campañas de diputados, que compra todo y lo obtiene todo, no por algo el 70% de los mexicanos piensa que “el crimen organizado financia muy o algo frecuente las campañas electorales’’, según advierte el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados.
Se nos vienen tiempos de propuestas, de imagen, de mercadotecnia y marketing político en busca de un puesto público, Las campañas electorales darán inicio formalmente el día siguiente del registro de candidaturas y tendrán una duración de 60 días, con lo que concluirán el 3 de junio de 2015. Los mexicanos que quieran y puedan saldrán a votar el domingo 7 de junio, como nunca antes más del 55% del padrón electoral se encuentra entre los 20 y los 40 años.
Nuestros nuevos representantes al poder legislativo, es decir nuestros diputados federales electos tomarán posesión de su cargo el 1 de septiembre de 2015, lo que marcará el inicio de la 63 Legislatura del Congreso de la Unión.
La pregunta que me hago es ¿Cómo se pretende blindar el acceso a candidaturas a personajes ligados con el crimen organizado? Tendremos que votarles y enterarnos que forman parte de ella a meses de que dejen la curul, la presidencia municipal o incluso la gubernatura. Esto sin duda es imposible, los partidos políticos poco hacen por blindar sus procesos de selección, ahí está el ejemplo que le platicaba hace unas semanas de cómo llegó al poder Salma Karrum, la historia se puede volver a repetir en cualquiera de los más de 2000 puestos que elegiremos los mexicanos.
Analizamos y podemos preguntarnos si este INE tan fuerte, académico, nuevo, y transparente tiene el poder o la facultad de detectar estas anomalías y la respuesta que encontramos es que NO. Pero una de las nuevas atribuciones que le otorgó la reciente reforma fue el revisar los topes y gastos de campaña, algo que se antoja imposible, auditar todas y cada una de las campañas con la lupa como se debería hacer implicaría tiempo dinero y esfuerzo, algo que definitivamente no se tiene y no se tendrá. Estas revisiones serán de cumplimiento formal, más no de cumplimiento social, se harán para cumplir un requerimiento legal sólo superficialmente y nunca se entrará al fondo del asunto y no es culpa del INE, sino de quien lo hizo comparsa.
Muy a pesar de la intimidante sanción que se estableciera en la reforma de que en caso de rebasar los topes de campaña se anularía la elección, ya veremos cuantas elecciones se anulan, dicen que hecha la ley hecha la trampa.
No dudo de la gran capacidad, empeño y espíritu del Consejero Presidente Lorenzo Córdova, de sus Consejeros que integran el Consejo General, pero esta labor resultará agotante, insultante para quienes desarrollan sus labores en el INE, ya que implica un desgaste importante y máxime con las reformas, con esta elección en modo “ a prueba de fallos” es difícil imaginar que esta maquinaria electoral a pesar del cambio de engranajes, de su aceitada por parte del legislativo y de su afinación podrá caminar como la máquina de un relojero.
El domingo 7 de junio lo sabremos, es cuestión de darle tiempo al tiempo…
Nos vemos la próxima semana.
@nexoestudios