«Cameron se tiene que marchar», «No te creemos más. Dimite Cameron» o «Lo que pasa en Panamá no se queda en Panamá» fueron algunos de los carteles que portaron los asistentes a la protesta mientras proferían gritos de «fuera, fuera Cameron».
Por Viviana García
Londres, 9 abr (EFE).- Cientos de personas se manifestaron hoy en el centro de Londres para pedir la dimisión del primer ministro británico, David Cameron, a raíz de la controversia por el caso de los «papeles de Panamá» y que ha salpicado al jefe del Gobierno.
Con pancartas y sombreros de Panamá, cientos de manifestantes se congregaron ante la residencia oficial del 10 de Downing Street para exigir la renuncia de político conservador después de que éste admitiese que se benefició de una inversión en un paraíso fiscal.
«Cameron se tiene que marchar», «No te creemos más. Dimite Cameron» o «Lo que pasa en Panamá no se queda en Panamá» fueron algunos de los carteles que portaron los asistentes a la protesta mientras proferían gritos de «fuera, fuera Cameron».
Uno de los manifestantes desplegó hoy un cerdo de cartón, pintado de rosa y con una foto de Cameron pegada en la nariz del muñeco, que fue colocada ante Downing Street antes de que la protesta marchase hacia un hotel del cercano barrio de Covent Garden, donde el primer ministro pronunciaba un discurso ante seguidores conservadores.
Desde la calle los participantes gritaban «fuera, fuera Cameron» mientras numerosos agentes del orden mantenían un fuerte dispositivo de seguridad y tenían bloqueada la entrada al edificio.
En su discurso, Cameron reconoció haber cometido fallos en la forma de abordar las revelaciones contenidas en los papeles de Panamá, que han desvelado que políticos, ricos y famosos han hecho inversiones en paraísos fiscales para evitar el pago de impuestos.
PIDEN DIMISIÓN
La oposición laborista ha exigido al primer ministro que haga este mismo lunes una declaración parlamentaria para explicar en detalle sus intereses financieros en el caso.
El líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, criticó hoy a Cameron por haber hecho una serie de declaraciones a la largo de la semana que han sido «de alguna forma confusas».
Para intentar disipar la polémica, el político «tory» anunció que hará pública su declaración de Hacienda, lo que obligará a otros destacados políticos del Gobierno y de la oposición a seguir los mismos pasos, según coinciden hoy los comentaristas británicos.
«Sé que hay lecciones que aprender (de esta polémica) y aprenderé. No culpéis al número 10 de Downing Street (su residencia oficial) o a asesores sin nombre, culpadme a mí», dijo Cameron.
«Estaba enfadado por lo que la gente estaba diciendo de mi padre. Lo quería y le echo de menos todos los días. Fue un padre maravilloso y estoy muy orgulloso por todo lo que hizo. Pero no debo dejar que eso ensombrezca la situación», agregó.
Cameron añadió que publicará su declaración de Hacienda de años pasados porque quiere ser «transparente» sobre esta situación.
«Seré el primer jefe de Gobierno, el primer líder de un gran partido político que lo hace y creo que es lo que hay que hacer», insistió el político conservador.
Después de negar durante unos días que no tenía intereses en paraísos fiscales, Cameron reconoció en una entrevista el jueves que tuvo acciones por valor de más de 30.000 libras (37.500 euros) en un fondo de inversión en Bahamas, pero que todas las transacciones estuvieron sujetas a los impuestos del Reino Unido.
Cameron, cuyo padre falleció en 2010, reconoció que fue titular junto con su esposa, Samantha, de 5 mil títulos de Blairmore Investment Trust, registrado en las Bahamas, entre 1997 y enero de 2010, cuatro meses antes de tomar posesión como primer ministro.
De acuerdo con la prensa, los documentos del bufete panameño Mossack Fonseca indican que Blairmore Holdings, que recibió su nombre de la finca familiar de los Cameron en Aberdeenshire (Escocia), manejó decenas de millones de libras en inversiones de familias adineradas.
El primer ministro británico, David Cameron, confirmó hoy que publicará su declaración de Hacienda tras admitir que tuvo acciones en un fondo de inversión en un paraíso fiscal, lo que ha generado críticas de la oposición laborista.
En una encuentro con activistas conservadores en Londres, Cameron admitió hoy fallos en la forma en que abordó sus asuntos financieros a raíz de las revelaciones contenidas en los papeles de Panamá, en los que aparecía un fondo de inversión creado por su padre, Ian.
«Esta no ha sido una gran semana», dijo el primer ministro, después de que admitiese en una entrevista el jueves que se benefició de un fondo de inversión de su padre antes de llegar al poder.
Cameron insistió en que se hace responsable por esta controversia y que publicará su declaración de Hacienda.
«Sé que hay lecciones que aprender (de esta polémica) y aprenderé. No culpéis al número 10 de Downing Street (su residencia oficial) o a asesores sin nombre, culparme a mí», afirmó.
«Estaba enfadado por lo que la gente estaba diciendo de mi padre. Lo quería y le echo de menos todos los días. Fue un padre maravilloso y estoy muy orgulloso por todo lo que hizo. Pero no debo dejar que eso ensombrezca la situación», afirmó.
Cameron añadió que publicará su declaración de Hacienda de años pasados porque quiere ser «transparente» sobre esta situación.
«Seré el primer jefe de Gobierno, el primer líder de un gran partido político que lo hace y creo que es lo que hay que hacer», insistió el político conservador.
Cameron admitió el jueves haber tenido acciones en un fondo de inversión creado por su padre en un paraíso fiscal a pesar de que días antes había insistido en que este era un asunto privado y que no estaba en posesión de títulos de ese tipo.
En una entrevista con la cadena ITV, Cameron explicó que tuvo en su poder acciones por valor de más de 30 mil libras (37 mil 500 euros) en un fondo de inversión de su padre en Bahamas, pero que todas las transacciones estuvieron sujetas a los impuestos del Reino Unido.
Cameron, cuyo padre falleció en 2010, reconoció que fue titular junto con su esposa, Samantha, de 5 mil títulos de Blairmore Investment Trust, registrado en las Bahamas, entre 1997 y enero de 2010, cuatro meses antes de tomar posesión como primer ministro.
Según su portavoz, el primer ministro y su esposa adquirieron acciones por 12.497 libras (15 mil 600 euros) y las vendieron por 31.500 libras (39.375 euros).
De acuerdo con la prensa, los documentos del bufete Mossack Fonseca indican que Blairmore Holdings, que recibió su nombre de la finca familiar de los Cameron en Aberdeenshire (Escocia), manejó decenas de millones de libras en inversiones de familias adineradas.
La oposición laborista ha pedido al primer ministro que haga este lunes una declaración en el Parlamento para explicar sus pasados intereses en un paraíso fiscal.