El viernes Trump anunció a su nominado para Secretario de Justicia y a una nueva Embajadora ante la ONU, al mismo tiempo que dos altos asesores se separaron de sus cargos para ayudar en la campaña del 2020. El anuncio sobre la separación de Kelly, Jefe de Despacho, fue ampliamente esperado y seguramente tendrá amplias repercusiones en la administración.
Washington, EU, 8 de diciembre (AP/EFE/SinEmbargo).— El Presidente Donald Trump está a punto de realizar sus anunciados cambios de gabinete en momentos en que enfrenta una amenaza bicéfala: por un lado el desafío de la campaña para la reelección, y por el otro las numerosas investigaciones en su contra.
Entre los más esperados, se encuentra el anunció, confirmado hoy por Trump, de que su Jefe de Gabinete, el general John Kelly, dejará su cargo a finales de este año, después de meses de roces y tensiones con el mandatario.
«John Kelly se irá hacia finales de año«, dijo Trump en declaraciones a los periodistas en la Casa Blanca.
Trump describió a Kelly como «un gran tipo» y subrayó que aprecia «mucho su servicio» durante el último año y medio al frente de la oficina presidencial de la Casa Blanca.
«Anunciaré quién reemplazará a John, probablemente de forma interina, en el próximo día o dos», agregó el Presidente.
El viernes Trump anunció a su nominado para Secretario de Justicia y a una nueva Embajadora ante la ONU, al mismo tiempo que dos altos asesores se separaron de sus cargos para ayudar en la campaña del 2020. Pero los cambios más importantes están aún por anunciarse. El esperado anuncio sobre el reemplazo de Kelly seguramente tendrá amplias repercusiones en la administración.
Trump no ha ocultado su insatisfacción con su equipo y en los meses recientes ha estado barajeando todo tipo de cambios. Postergó los anuncios hasta después de las elecciones de mitad de período en noviembre, obedeciendo los consejos de sus asesores que le decían que los frecuentes cambios de administración, ya inéditos en la historia estadounidense, podrían afectar al partido aun más en las urnas.
Ahora, casi un mes después de esos comicios, en que el Partido Republicano perdió la mayoría en la Cámara de Representantes y logró apenas ínfimos avances en el Senado, Trump está echándole manos a la obra.
El viernes anunció que William Barr, quien fue secretario de justicia bajo el gobierno de George H.W. Bush, será su nominado para ese mismo cargo. De ser confirmado, Barr reemplazará a Jeff Sessions, a quien Trump bruscamente destituyó como castigo por haberse abstenido de participar en la investigación sobre denuncias de que la campaña de Trump conspiró con el gobierno ruso para manipular las elecciones.
Sessions fue destituido menos de 24 horas después de las elecciones, pero los otros cambios han quedado en pausa con lo que la administración ha quedado sumida en una parálisis en que los empleados no están seguros de qué es lo que deben hacer.
Trump anunció además que la portavoz del Departamento de Estado Heather Nauert será su nominada como embajadora de Estados Unidos ante la ONU en reemplazo de Nikki Haley. Y además dos funcionarios de la Casa Blanca dejarán sus puestos para ayudar en la campaña reeleccionista del mandatario en el 2020: el Director de Asuntos Políticos Bill Stepien y el Director de Relaciones Públicas Justin Clark.
-Con información de Zeke Miller y Jill Colvin, AP