Las tendencias de las redes sociales para el 2018 están íntimamente ligadas al proceso económico y a las nuevas formas de consumo de la población mundial. Las transformaciones que van a sufrir las redes el próximo año son un atisbo de un futuro que nos alcanzó, un futuro en el cual podemos vislumbrar una dinámica global en donde la tecnología va a repercutir directamente sobre las formas de consumo, asegura especialista.
Por Alberto Iglesias Fraga
Ciudad de México, 8 de diciembre (TICbeat/SinEmbargo).- Cada día, miles de millones de personas en todo el mundo entramos a nuestros perfiles en redes sociales, compartimos contenidos personales en ellas, accedemos a la información del mundo a través de ellas y nos comunicamos con nuestros amigos y familiares por medio de sus chats y apps de mensajería instantánea.
Y es que imaginarse nuestra sociedad conectada sin la influencia de las redes sociales parece casi una utopía.
Igualmente, las marcas han sabido adaptarse a este nuevo campo de juego, donde la relación con sus consumidores es más directa que nunca y en el que se magnifican tanto los buenos comportamientos como las malas experiencias de los clientes.
Un nuevo entorno que se ha ido consolidando año tras año a una velocidad vertiginosa si nos paramos a pensarlo durante apenas un segundo.
Sin embargo, las redes sociales son un universo en constante cambio, en evolución permanente. Por ello, es posible vislumbrar algunas de las tendencias que marcarán el paso en este campo durante el próximo año. Entre ellas, destaca el sostenido aumento del vídeo como soporte por defecto, la madurez del marketing de influencers o la dual situación por la que pasará Twitter en 2018.
¿Quieres conocer cuáles son estas tendencias y en qué datos objetivos se sustentan las redes sociales en 2018?
EL FUTURO DE TWITTER
Fue una de las pioneras, referente a la hora de compartir pensamientos rápidos y de servir de punta de entrada a informaciones en tiempo real antaño inimaginables.
Para las marcas y famosos es también la mejor red social, ya que es la que permite una mayor exposición (pública) de los mensajes y donde mejor se puede medir el impacto que tienen nuestros mensajes, al no existir un grado de privacidad tan alto como en Facebook o Instagram.
Sin embargo, y pese a que es la opción por defecto (y ha llegado a alianzas para ello) a la hora de compartir impresiones sobre programas de televisión o para conocer los pensamientos de políticos, empresarios y famosos, la realidad es que Twitter seguirá andando por la senda de la incertidumbre.
Recordemos que ya ha sido superada en usuarios activos al mes no sólo por la todopoderosa Facebook, sino también por su hermana pequeña Instagram.
También hemos de sumar los malos resultados financieros que la empresa del pájaro azul viene cosechando desde su nacimiento, imposibles de reflotar siquiera con la vuelta al redil de Jack Dorsey como CEO. Tampoco parece que haya contribuido a mejorar la situación el reciente aumento del número de caracteres permitido en los posts, una de las enseñas de Twitter. Por no contar las quejas, especialmente en Estados Unidos, contra la política de esta compañía de bloquear a determinados usuarios por sus posiciones o comentarios políticos extremos, mientras que se permite a otros –como Donald Trump– soltar auténticas barbaridades en esta plataforma.
¿Cuál podría ser la tabla de salvación de Twitter en 2018? Algunos analistas ya han predicho que Jack Dorsey y los suyos podrían plantearse una venta de la firma, actualmente cotizada en Bolsa, a inversores privados para reestructurarse sin la presión de los mercados.
Igualmente, se espera que la red social incluya más y mejores opciones publicitarias, de modo que la inversión realizada en Twitter pueda equipararse en retorno y alcance a las actualmente desplegadas en Facebook.
EL VÍDEO SEGUIRÁ SIENDO EL REY
Aunque el texto y la imagen siguen siendo componentes esenciales de nuestra vida online, parece que el soporte rey es y seguirá siendo el vídeo.
Primero fueron los propios usuarios los que comenzaron a comunicarse mediante vídeo y a enviarse esta clase de contenidos de forma viral a través de sus chats y muros personales. Pero poco tardaron las marcas en unirse a esta moda y desarrollar campañas completas con este soporte en el eje central de su estrategia.
La experta en redes sociales, Vivian Michaels, recogía en su blog algunos estudios que corroboran esta impresión, incluso en segmentos profesionales: el 43 por cientode las personas quiere ver contenido de vídeo de especialistas en marketing y el 51.9 por ciento de los profesionales de marketing de todo el mundo consideran el vídeo como el tipo de contenido con el mejor ROI.
Debido a la creciente popularidad del contenido audiovisual, podemos esperar que la tendencia continúe, en tanto que los vídeos aumentan la participación en forma de me gusta, acciones, retweets y comentarios en todas las plataformas de redes sociales.
Además, de la mano de nuevos formatos, como la transmisión en vivo, las empresas tienen una amplia gama de opciones para explorar e implementar en sus campañas de marketing en redes sociales.
MÁS MENSAJERÍA INSTANTÁNEA
Más de 2 mil 500 millones de personas en todo el mundo usan una o más aplicaciones de mensajería instantánea, como WhatsApp, Line o Telegram. Hasta ahora, este tipo de servicios han permanecido bastante alejados del ámbito comercial, con la única excepción de Facebook Messenger que además de publicidad ha incorporado también chatbots de muy diversas marcas internacionales.
Pero en 2018 esta tendencia en redes sociales que las compañías entren en las apps de mensajería terminará por consolidarse. Todas las consultoras del sector dan por hecho que los chatbots serán uno de los principales canales de comunicación con el cliente, especialmente para al atención al usuario y para la compra de productos de alto valor añadido, como billetes de avión o reservas de hotel.
Conforme estas prácticas se vayan extendiendo, es posible que veamos también nuevas estrategias de redes sociales donde estas apps de mensajería instantánea deban establecer sinergias con el resto de plataformas, como Facebook o Twitter. Un nuevo universo omnicanal que está todavía en pañales.
MARKETING DE INFLUENCERS
Los influencers son una de las formas de publicidad menos invasivas y, al mismo tiempo, más efectivas que existen en el universo online.
Sus posibilidades son inmensas y no es un fenómeno restringido solo a grandes famosos y a empresas con presupuestos millonarios: cualquier pyme puede abordar el marketing de influencers de forma exitosa si lo plantea de una manera original o si apuesta por seguir un planteamiento de microinfluencers, otra de las tendencias estrella en este ámbito.
Pero por si quedan dudas, podemos tirar de datos para demostrar la importancia que tiene y tendrá el marketing de influencers en un futuro cercano: el 70 por ciento de los suscriptores adolescentes de YouTube confían más en las opiniones de los influencers que en las celebridades de toda la vida, el 86 por ciento de las mujeres recurre a las redes sociales antes de realizar una compra y el 71 por ciento de los consumidores reconoce que tiene más probabilidades de hacer una compra en base a una referencia de las redes sociales.
Por todo ello, en 2018, no será suficiente establecer una colaboración con algún influencer al azar, especialmente ahora que esta estrategia de marketing se ha convertido en la corriente principal.
En cambio, la atención se centrará en la construcción de relaciones significativas con personas influyentes, el establecimiento de objetivos claros y la elección de una persona que cumpla con todos los valores y requisitos exigidos por nuestra marca.
LA GENERACIÓN Z
Un estudio de Goldman Sachs ya alerta de la que será la principal transformación de las redes sociales (y el mundo en general) en los próximos cursos: la llegada de la generación Z. Los miembros de este grupo demográfico, sucesor de los millenials y cuyos ‘mayores’ tienen ya 22 años, pronto conformarán el principal segmento de consumo, accederán al mercado laboral y serán una fuerza de decisión de compras extremadamente relevante para las marcas.
Pero estas personas son 100 por ciento nativas digitales y no responden prácticamente a las estrategias de marketing y comerciales que se han venido haciendo en los últimos siglos.
Por ello, las empresas están adaptando sus planteamientos para poder abordar a estos jóvenes a través de canales como Snapchat o Instagram, responder a sus necesidades en el lenguaje que emplean y desarrollar experiencias de usuario completamente basadas en la tecnología para romper esta barrera generacional.
