Sídney (Australia), 8 oct (EFE).- El gobierno de Australia señaló hoy que el centro de detención para solicitantes de asilo que tiene en Nauru se rige por las leyes locales, por lo cual escapa a su control, durante una vista ante el Tribunal Superior del país.
Justin Gleeson, quien defiende los intereses australianos, apuntó que Camberra solo ayudó a Nauru a «implementar sus leyes en su territorio», recoge el portal del diario «Sydney Morning Herald».
Los magistrados analizan, en una vista de dos días que se inició ayer, la legalidad del régimen de detención en países terceros impuesto a inmigrantes que solicitan asilo en Australia, una práctica gubernamental muy criticada por las organizaciones humanitarias.
Aunque las vistas está previsto que terminen hoy, puede pasar un tiempo hasta que se emita la sentencia firme del tribunal, apuntan los medios locales.
El Centro Legal de Derechos Humanos presentó el caso en nombre de una mujer bangladesí que fue trasladada en 2014 del centro de Nauru a Australia para un tratamiento durante su última etapa de embarazo.
El defensor australiano remarcó que el acuerdo entre los países no establece requisitos de detención, pese a que Australia financia el recinto y a la empresa que se encarga de la seguridad de este.
Este lunes, el Gobierno de Nauru anunció que podrá fin al régimen de detención y tramitará en una semana todas las solicitudes de asilo.
El caso de la mujer bangladesí y su bebé de diez meses puede afectar a más de 200 personas que se encuentran en una situación similar, tras ser trasladadas a Australia desde los centros en ese estado insular o Papúa Nueva Guinea para recibir asistencia médica.
