La RAE recibió en marzo un total de 71 millones 134 mil 198 consultas, mientras que hasta ahora eran en torno a los 45 millones de accesos.
Madrid, 8 abr (EFE).- Resiliencia y bizarro pero también amor, estado y ciencia fueron algunas de las 71 millones de consultas que «atendió» el pasado mes de marzo el diccionario de la RAE en línea, cerca de un 60 por ciento más que las recibidas en meses anteriores, informaron hoy a Efe fuentes de la Academia de la Lengua.
La 23 edición del Diccionario de la lengua española (DLE), publicada en 2014 y disponible gratuitamente en internet desde octubre de 2015 con el patrocinio de la Obra Social la Caixa, recibió en marzo un total de 71 millones 134 mil 198 consultas, mientras que hasta ahora eran en torno a los 45 millones de accesos.
«Una de las razones de esta importante subida, de la que estamos muy satisfechos, es la buena acogida de las nuevas aplicaciones gratuitas del diccionario para dispositivos móviles, tanto para Apple como para Android, que cada vez son más utilizadas por los usuarios», explicó a Efe el director de la RAE, Darío Villanueva.
Las palabras más buscadas han sido anodino, resiliencia, amor, feminismo, estado, ciencia, derecho, bizarro, cultura, respeto y conciencia.
También han sido muy frecuentes las búsquedas relacionadas con formas verbales que suelen provocar dudas, tales como raer, rayar, haber, echar o hallar.
De los 71 millones de consultas al diccionario de la RAE, el 59.05 por ciento se han hecho en la web y 40.95por ciento desde dispositivos móviles.
El portal de la RAE (rae.es) tuvo en marzo algo más de siete millones de usuarios únicos, según datos de Google Analytics aportados por la Academia.
El principal número de accesos fueron desde España (40.8 por ciento), México (12.48 por ciento), Argentina (7.38por ciento), Colombia (6.58 por ciento) y Perú (4.81por ciento).
Para la Real Academia, indicó su presidente, «es muy alentador ver que el interés de los hispanohablantes por su lengua no solo se mantiene sino que aumenta mes a mes».
«Estas cifras sobre las consultas al diccionario son la mejor prueba de ello y nos animan muy especialmente en nuestra tarea actual: diseñar la planta y el modelo del nuevo diccionario, que ya no nacerá como libro en papel, aunque tenga también su correspondiente edición impresa, sino como obra concebida digitalmente desde su inicio», añadió Villanueva. EFE