Southern Copper , que opera dos minas y una refinería en Perú, es uno de los mayores productores de cobre del mundo y está controlado por el Grupo México.
Ciudad de México, 7 de abril (EconomíaHoy).- El Gobierno peruano y Southern Copper deben trabajar juntos para sacar adelante un proyecto de cobre de 1 mil 400 millones de dólares y convencer a la población de que su desarrollo no será perjudicial para la comunidad, dijo el viernes el Presidente Pedro Pablo Kuczynski.
El desarrollo del proyecto cuprífero Tía María, ubicado en la región de Arequipa, fue suspendido en el 2015 tras violentas protestas de pobladores que rechazan el plan por temor a que la operación deje sin agua sus tierras.
«Hay posibilidades, pero la empresa y el Gobierno tenemos que trabajar juntos para convencer a la población de que el proyecto no les va a hacer daño», afirmó Kuczynski a la radio local RPP.
Southern Copper , que opera dos minas y una refinería en Perú, es uno de los mayores productores de cobre del mundo y está controlado por el Grupo México.
Kuczynski afirmó que luego de una visita reciente que hizo a Cocachacra, donde está ubicado el proyecto, la población «se está calmando» ante los planes de desarrollo social planteados por el Gobierno para la zona, como construir una represa.
«Perú quiere minería, pero minería limpia», agregó el mandatario.
Respecto al proyecto de cobre Michiquillay, que el Gobierno espera licitar en el segundo trimestre, el mandatario dijo que hay firmas interesadas, entre ellas los dueños del plan Quellaveco, de la minera AngloAmerican.
El proyecto de Michiquillay, que está en fase de exploración y que requeriría una inversión de al menos 2 mil millones de dólares, está ubicado en el norte del país y había sido devuelto al Estado en 2014 por AngloAmerican debido a un ajuste en sus planes