El sismo de 6.4 grados de magnitud tuvo su epicentro en la aldea de Meinung, al sur de Taiwán y a 16.7 kilómetros de profundidad, y sacudió el sur de la isla a las 03.57 hora local (19.37 GMT del viernes), según el Servicio Meteorológico Central.
Taipei, 7 feb (EFE).- Los equipos de rescate taiwaneses intensifican la busca de supervivientes del terremoto de 6.4 grados en la escala de Richter que asoló el sábado Tainan, en el sur Taiwán, y que ya ha causado 23 muertos y más de 500 heridos, según el Servicio Nacional de Emergencias.
Todavía persisten las dudas sobre el número de personas atrapadas, y los bomberos estiman que se trata de unas 120, de las que cerca de 30 tienen más probabilidades de ser rescatadas vivas, con las que sus familiares no han podido contactar y que se teme que estaban en el edificio Weiguan Jinlong.
Al mismo tiempo, en Tainan los equipos de rescate, con el apoyo de consejeros japoneses que han llegado hoy a la isla, luchan contra el frío y una creciente dificultad en el rescate de los atrapados en el inmueble Weiguan Jinlong, donde han fallecido quince personas, incluida una niña de diez días.
El Ministro de Interior taiwanés, Chen Wei-zen, prometió continuar e intensificar las operaciones de rescate, que no se interrumpieron en toda la noche, y que esta mañana han incorporado al padre de unos niños atrapados, ansioso por rescatar a sus pequeños.
«Aún hay esperanzas y estamos rescatando a gente con vida. Después de ocho horas y media de trabajo hemos logrado sacar a un hombre vivo», dijo hoy a la prensa el alcalde de Tainan, William Lai.
Así, un niño de seis años fue rescatado durante la madrugada, tras más de 24 horas atrapado, y su reacción captó la atención de las cámaras de televisión locales cuando lo primero que dijo fue «no estoy herido», manteniéndose sereno y sin llorar.
También se han lanzado operaciones de ayuda y socorro para todos los desplazados, con mil 200 camas en colegios y donaciones de artículos y comidas calientes por parte de organizaciones como la Fundación Budista Tzu Chi y la Cruz Roja.
Varios hoteles de Tainan han ofrecido alojamiento gratis a quienes han perdido sus hogares en el terremoto, mientras que grupos empresariales locales y organizaciones benéficas han donado más de 50 millones de dólares para el socorro de los damnificados.
Ya se ha restaurado el suministro de electricidad a la mayor parte de los 173 mil hogares que sufrieron cortes de energía y también el tráfico ferroviario hasta la ciudad central de Chiayi, pero no más al sur.
Unos 68.000 pasajeros se vieron afectados por las cancelaciones de trenes, que aún no han normalizado sus servicios, en los días de más tráfico anual, debido al Año Nuevo Lunar, que se celebra esta medianoche y mañana.
Las temperaturas por la noche en Tainan fueron inferiores a los diez grados, lo que unido a la humedad se tradujo en un inusual frío para la isla, que aún continúa y se debe a una ola fría procedente de China.
El Ministerio de Educación reveló que 289 escuelas en el sur de Taiwan, principalmente en Tainan y Kaohsiung, han sido dañadas por el terremoto y que una alumna de primaria murió, mientras que otros tres estudiantes resultaron heridos.
En el sector agrícola, los avicultores en Tainan y Kaohsiung sufrieron perdidas millonarias, mientras que en el sector pesquero y agrícola no se han reportado aún daños.
El seísmo de 6.4 grados de magnitud tuvo su epicentro en la aldea de Meinung, en el sur de Taiwán y a 16,7 kilómetros de profundidad, y sacudió el sur de la isla a las 03.57 hora local del sábado (19.37 GMT del viernes), según el Servicio Meteorológico Central.
La cantante Madonna, de gira en Taiwán, expresó en la noche del sábado sus condolencias «a los damnificados y sus familiares» al inicio de su actuación en Taipei.