The Weeknd marca el primer lanzamiento discográfico del 2022 con «Dawn FM», su álbum más reciente con grandes colaboraciones y una influencia que mezcla los estilos de Michael Jackson y Daft Punk.
Por Javier Herrero
Madrid, 7 de enero (EFE).- Casi sin tiempo para digerir las sobras de la Navidad, ha llegado este viernes el primer gran lanzamiento discográfico de 2022, «Dawn FM» de The Weeknd, en el que se vaticina la llegada de «un nuevo amanecer» con música que bebe tanto de Michael Jackson como de los ramalazos electrónicos de Daft Punk.
Su autor lo definió en una entrevista como una espera en el purgatorio, pero concebido como un atasco en el coche amenizado por la emisora que da título al disco («Amanecer FM», en español) y en la que un locutor (el mismísimo Jim Carrey) invita a la reflexión tras la debacle como ayuda en el tránsito «hacia la luz».
Con la energía residual de una noche de fiesta y baile, en este álbum se hace recuento de los pecados cometidos durante la noche. Se habla de excesos, drogas, infidelidad, errores y fama, pero no con culpabilidad punzante, sino como introspección reposada, con una mano amiga apoyada sobre el hombro que te prepara para la expiación.
Se explica así el leve reflejo de sol que se abre paso entre las sombras de la ya viralizada portada en la que The Weeknd, de 31 años, aparece como si hubiese envejecido cuatro décadas durante estos dos años de pandemia en los que él aprovechó para componer su quinto disco de estudio, una continuación del previo «After hours» (2020).
Si aquel exitazo que elevó aún más la categoría de ídolo global de Abel Tesfaye (Toronto, 1990) subrayó su querencia por los arreglos electrónicos y ochenteros, recreándose especialmente en paisajes nocturnos, aquí el canadiense avanza al siguiente nivel.
«Has estado demasiado tiempo en la oscuridad y es la hora de despertar a la luz y de aceptar tu destino con los brazos abiertos», indica la voz sosegante del actor Jim Carrey en los compases iniciales del álbum.
Válido como un puente hacia la pospandemia, tras la muerte en vida que muchos seres humanos a lo largo y ancho del planeta han experimentado a causa de la COVID-19, el destino ha querido sin embargo que «Dawn FM» se publique justo la semana en la que ómicron ha amplificado sobremanera la sexta ola, reavivando viejos temores.
Sorprende que se haya esperado hasta estos primeros compases del nuevo año, recién concluida la época de mayores ventas discográficas, para lanzar un disco que en verano ya dio a conocer su primer y único anticipo, «Take My Breath», y que, según su autor, en octubre ya estaba listo a la espera solo de un par de aportaciones foráneas que eran «claves para la narrativa» general.
Entre los colaboradores, además del citado Carrey, aparecen dos figuras del mundo del hip hop: Tyler, The Creator, músico en estado de gracia que viene de despachar uno de los discos de 2021, «Call Me If You Get Lost», y el más veterano Lil Wayne, uno de los nombres más influyentes de la actual escena, con cinco Grammys en sus vitrinas.
Junto a ellos figura también el prestigioso productor Oneohtrix Point Never como arquitecto imprescindible con The Weeknd de la gran mayoría de los 16 cortes, en cuyas firmas también aparecen nombres muy reputados como los de Max Martin o Calvin Harris.
Gracias a su buena mano sobresalen cortes como «Gasoline», en el que la icónica voz del vocalista es procesada hacia irreconocibles tonos graves, o «Sacrifice», con un bajo funky que retrotrae a Daft Punk, pero sobre todo, a punto de terminar, «Less Than Zero», que está llamado a ser el otro gran sencillo de este álbum.
Igual que Daft Punk reivindicaron a Giorgio Moroder en «Random Access Memories» (2013), el canadiense ha querido realizar aquí su brindis al sol por Quincy Jones, artífice de los discos más legendarios de Michael Jackson, de «Off The Wall» a «Bad», pasando por «Thriller».
A él le dedica «A Tale By Quincy». En dicho corte, antes de que irrumpa una melodía con su inconfundible sello «r&b», que atestigua una vez más la gran influencia que la obra de Michael Jackson ha jugado en su forja como artista, Jones narra en primera persona los problemas familiares que fueron una constante en su vida.
Sobre el propósito reflexivo de esa narración, del disco entero, resultan reveladoras las palabras casi susurradas en el postrero «Panthom Regret by Jim» por Carrey, coautor de las mismas: «Ahora que todos los planes futuros se han pospuesto y es hora de mirar hacia atrás, a las cosas que pensabas poseer. ¿Los recuerdas bien? […] ¿Estuviste alguna vez en sintonía con la canción que la vida tarareaba?».