Para la Iglesia Católica esta falta no prescribe, a diferencia de las leyes; Franco Coppola afirma que la máxima pena interna es la dimisión clerical. Han detectado sacerdotes que quieren jugar a una ‘doble vida’, teniendo familia.
Saltillo, 6 de septiembre (Vanguardia).- Franco Coppola, nuncio apostólico en México, aceptó que más casos se han sumado a las más de 270 denuncias de pederastia por parte de sacerdotes en el país y aunque para la Iglesia Católica dicha falta no prescribe, la máxima pena es la dimisión del estado clerical.
“La mayor parte de los casos son situaciones que ocurrieron hace casi 10, 15 y 20 años, muchas veces en las que se prescribe como delito ante la Ley Civil del Estado, pero en la Iglesia no prescribe, para la Iglesia es algo que debe investigarse”, reiteró.
El líder católico aseguró que en la mayoría de los casos se trata de abusadores seriales, personas que han perdido su capacidad de controlarse, pues se aprovechan de una persona indefensa para desahogar instintos personales.
Coppola admitió que por mucho tiempo la Iglesia se equivocó en cómo resolverlo, pues era algo nuevo, pero después de 20 años de enfrentar situaciones similares, la Iglesia tiene todo un camino y un procedimiento para castigar a quienes han cometido esta falta.
El máximo castigo -afirmó el Nuncio- es la dimisión del estado clerical, pues no es capaz de controlarse y si se deja dentro del Ministerio, tarde o temprano recaerá en el mismo problema y no puede ser sacerdote.
Actualmente, destacó, hay todo un trabajo dentro de los seminarios, en las parroquias y en las catequesis para preparar en el respeto a los demás y no aprovechar a las posiciones de poder para dañar a los demás y respetar el cuerpo y la dignidad de las personas
Asimismo, destacó que también se han identificado a sacerdotes “jugando con el señor” al intentar mantener una “doble vida” por lo que también han dimitido, incluso, si son casos de sacerdotes que son padres de familia y aunque quieren seguir en el sacerdocio, esto no es permitido.
Pues la Iglesia no permitirá que desampare a ese pequeño, ni siquiera cuando asegure alguna pensión, pues el dinero no es suficiente y es necesario que permanezca a lado de su hijo, agregó.
De acuerdo con víctimas de pederastia clerical, en Coahuila existen señalamientos en contra de 12 sacerdotes por presuntamente haber abusado de menores en las últimas décadas en la entidad.
En algunos de estos casos, de acuerdo a autoridades ministeriales, ya no se podría actuar, debido a que las faltas habrían prescrito.
Entre las denuncias que sí han prosperado está el caso de Juan Manuel Riojas, conocido en Piedras Negras como el padre Meño, quien se encuentra purgando una sentencia de 13 años, luego de haber sido procesado por los delitos de violación calificada y violación calificada en grado de tentativa, luego de haber sido denunciado por dos menores de edad.
En enero de 2020, la Conferencia del Episcopado Mexicano hizo un llamado para que no prescriban los delitos de abuso sexual.