El joven de 29 años resultó gravemente herido cuando un policía le disparó siete veces en la espalda cuando intentaba entrar en su automóvil en Kenosha.
Ciudad de México, 6 de septiembre (RT).- Jacob Blake, el afroamericano que el 23 de agosto fue baleado siete veces por la espalda durante su detención por parte de la Policía de Kenosha (estado de Wisconsin, EU), ha grabado un poderoso mensaje desde su cama del hospital.
A pesar de sus heridas, que probablemente lo dejarán paralizado de cintura para abajo, Blake afirmó a sus seguidores que «hay mucha más vida por vivir».
«Tu vida, y no solo tu vida, tus piernas, algo que necesitas para moverte y avanzar en la vida, te las pueden arrebatar así, hombre», dijo el joven en la grabación, publicada en Twitter por su abogado Ben Crump.
Vestido con una bata de hospital, Blake se quejó de su constante dolor. «Veinticuatro horas, las 24 horas es dolor, no es más que dolor. Duele respirar, duele dormir, duele moverse de un lado a otro, duele comer», aseguró en el video, que tiene más de 600 mil reproducciones en Twitter.
Tras su dolorosa experiencia, instó a los internautas a cambiar sus vidas. «Por favor, les digo, cambien sus vidas. Podemos mantenernos unidos, ganar algo de dinero, hacer que todo sea más fácil para nuestra gente, porque se ha perdido mucho tiempo», destacó.
#JacobBlake released this powerful video message from his hospital bed today, reminding everyone just how precious life is. #JusticeForJacobBlake pic.twitter.com/87CYlgPDBj
— Ben Crump (@AttorneyCrump) September 6, 2020
El joven de 29 años resultó gravemente herido cuando un policía le disparó siete veces en la espalda cuando intentaba entrar en su automóvil en Kenosha.
Las imágenes de los hechos muestran a Blake caminando hacia una camioneta seguido por dos oficiales, cuando uno de ellos abre fuego contra la víctima en el momento en que esta abría la puerta del vehículo. Los dos agentes que intentaban detener a Blake fueron suspendidos.
Tres meses después de la muerte de George Floyd, el caso de Blake ha desencadenado una nueva ola de manifestaciones en varias ciudades estadounidenses. Las protestas en Kenosha comenzaron pacíficamente la noche que dispararon a Blake, pero luego se volvieron violentas.