Después de que la Suprema Corte en Estados Unidos revocara Roe vs Wade, múltiples estados han buscado prohibir a nivel local el derecho a la interrupción del embarazo, e Indiana se convirtió en el primero en aprobar restricciones al aborto.
Por Arleigh Rodgers
INDIANÁPOLIS, Indiana, EU (AP) — Indiana se convirtió el viernes en el primer estado de Estados Unidos que aprueba restricciones al aborto desde que la Corte Suprema revocó Roe vs Wade, luego de que el Gobernador republicano firmó de inmediato el veto casi total a la interrupción del embarazo que había recibido luz verde poco antes.
La prohibición, que entrará en vigor el 15 de septiembre, incluye algunas excepciones. Se permitirá el aborto en casos de violación e incesto, antes de las 10 semanas posteriores a la fecundación; para proteger la vida y la salud física de la madre, y si se diagnostica una anomalía letal en el feto. Las víctimas de abordo e incesto no tendrán que firmar una declaración jurada ante notario para dar fe de una agresión, como se había propuesto.
Bajo la nueva ley, la interrupción del embarazo puede practicarse sólo en hospitales o en centros ambulatorios propiedad de hospitales, lo que supone que las clínicas para abortos perderán su licencia. Un doctor que practique un aborto ilegal o no presente los reportes requeridos perderá su licencia médica, una redacción que endurece la ley estatal actual, que contempla que el facultativo «puede» perder el permiso para ejercer.
«Personalmente, estoy muy orgulloso de cada hoosier (residente de Indiana) que dio un paso adelante para compartir valientemente su opinión en un debate que es probable que no cese pronto», afirmó el Gobernador Eric Holcomb en un comunicado en el que anunció la firma de la normativa. «Por mi parte, como su Gobernador, seguiré escuchando».
El Senado dio luz verde a la nueva ley por 28 votos a favor y 19 en contra, luego de que en la Cámara estatal fue aprobada por 62-38.
La de Indiana fue una de las primeras legislaturas de mayoría republicana en debatir el endurecimiento de la ley del aborto tras la decisión de la Corte Suprema en junio, que retiró la protección constitucional al procedimiento. Pero es el primer estado en aprobar el veto en ambas cámaras, luego de que los legisladores de Virginia Occidental dejen pasar esa oportunidad el 29 de julio.
«Me alegro de haber terminado con esto, uno de los mayores retos que hemos enfrentado como Asamblea General estatal, al menos en el tiempo que he estado aquí», dijo el presidente del Senado Rodric Bray a reporteros tras la votación. «Creo que esto es una gran oportunidad y vamos a trabajar sobre esto a medida que avanzamos desde aquí».
La Senadora Sue Glick, que patrocinó el proyecto de ley, indicó que no cree que «todos los estados lleguen al mismo punto» pero que la mayoría de los residentes en Indiana respaldan aspectos de la norma.
Algunos senadores de ambos partidos lamentaron las disposiciones del texto y el impacto que tendrá en el estado, incluyendo en las mujeres con bajos ingresos y en el sistema de salud. Ocho republicanos se unieron a los 11 senadores demócratas para votar en contra.
«Estamos retrocediendo en la democracia», apuntó la Senadora demócrata Jean Breaux, que llevaba un lazo verde en apoyo al derecho al aborto en la solapa. «¿Qué otras libertades están en la guillotina, esperando a ser recortadas?».
Los debates mostraron la división de los residentes sobre el tema, que se reflejó en las horas de testimonios que los legisladores escucharon en las dos últimas semanas. Rara vez, si es que ocurrió, los residentes expresaron su apoyo a la norma en sus declaraciones, mientras los activistas en favor del aborto sostienen que la nueva norma va demasiado lejos y los antiabortistas defienden lo contrario.
Los debates se celebraron en medio de un panorama cambiante sobre el aborto en todo el país: los republicanos enfrentan algunas divisiones internas y los demócratas ven un posible impulso en año electoral.
Los activistas proaborto se manifestaron en el exterior de las cámaras estatales.
El veto de Indiana se produjo tras la tormenta política causada por el caso de una víctima de una violación de 10 años que tuvo que viajar al estado desde el vecino Ohio para interrumpir su embarazo. El caso ganó atención cuando un médico de Indianápolis dijo que la menor tuvo que ir a Indiana debido a las prohibiciones vigentes en su región.