Empresarios y comerciantes de Acapulco denunciaron que luego de las balaceras en el puerto del 24 de abril, no hay vida nocturna en la zona y que “los negocios están en una quiebra inminente». Por ello, demandaron que durante el año que el Gobernador Héctor Astudillo pidió como plazo para mejorar la seguridad se garantice el paso libre por la Autopista del Sol, les otorguen descuentos en impuestos y les permitan pagar la mitad por el servicio de luz.
Por Karla Galarce Sosa y Mariana Labastida
Ciudad de México, 5 de mayo (SinEmbargo/El Sur).- Presidentes de distintas cámaras de comercio, empresariales y de la industria de Acapulco coincidieron en que un año es mucho tiempo para que el gobierno presente resultados reales que reduzcan la inseguridad, en declaraciones por separado, advirtieron que Acapulco “no va a aguantar, los comercios, las empresas, no van a resistir”.
Lo anterior, luego de que ayer el Gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, pidió a los habitantes que resistan “un año más” para mejorar las condiciones de seguridad, pues consideró que la crisis que vive Guerreo es un “asunto de mediano plazo”.
Integrantes de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos de Acapulco (Canaco-Servytur) exigieron a los tres niveles de gobierno el establecimiento de una mesa de atención del sector económico, que les ayude a resolver “la grave crisis económica” por la que atraviesan mil 800 negocios.
Dijeron que la situación es “insostenible” debido a la falta de liquidez y el permanente “acoso” de instituciones como el IMSS, el SAT, la CFE y otras que exigen sus pagos.
Informaron que aunado a la “crisis económica” ocasionada por la inseguridad, al menos hay 480 inmuebles que fueron embargados a empresarios acapulqueños luego de que los bancos “engañaron” a beneficiarios de créditos, porque supuestamente serían otorgados con tasas preferenciales y no debían contar con avales crediticios.
Señalaron en conferencia de prensa, efectuada en la sede de la Canaco en el puerto, que después del 24 de abril no hay vida nocturna en Acapulco, además de que “los negocios están en una quiebra inminente”.
Durante la conferencia se explicó que los procesos que tienen los negocios por embargo son judiciales, pues los juzgados, por instrucciones de los abogados de los bancos, están embargando casas y locales comerciantes.
“Pudieran llegar a 480 comerciantes que tuvieron esos programas de apoyo emergente durante la tormenta Manuel (…) además de todo esto, se destruyó ahora por el huracán de la violencia (…) y con el crimen organizado repercutió de manera más severa que (la tormenta) Manuel”, lamentó Alejandro Martínez Sidney durante su intervención.
Detalló que son mil 800 revisiones y auditorías por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (CAPAMA).
El hotelero y restaurantero Javier Saldívar Rodríguez argumentó que el problema de inseguridad y que derivó en crisis para los empresarios, no es de este año.
Añadió que “Acapulco ha venido sufriendo problemas de violencia desde el 2009 hasta la fecha”, dijo. Y mencionó que algunas cadenas de negocios han tenido que salir del puerto debido a que sus inversiones no vieron resultados en ganancias.
EN ESTE AÑO SE HAN CERRADO 300 COMERCIOS
“Son unos 300 negocios que han bajado las cortinas y que estaban afiliados a esa cámara empresarial. El turismo no puede vivir de dos días”, criticó en alusión a la celebración de altas cifras de ocupación los fines de semana, que festejan funcionarios del Gobierno estatal y el propio Gobernador Héctor Astudillo Flores.
Los empresarios retaron a los funcionarios que celebran las altas cifras de ocupación a que cobren sólo dos días a la semana y la trabajen completa.
Martínez Sidney señaló que hay descoordinación sobre seguridad entre los tres niveles de gobierno y aseguró que una muestra de ello fue la noche del 24 de abril en la Costera y el posterior cierre de negocios durante las noches.
“Es evidente, la estrategia (de seguridad) no ha sido concreta (…) las dependencias que nos dan seguridad trabajan independientemente y a su criterio. La presencia policiaca la vemos en exageración y eso ocasionó que el domingo 24 de abril pasara algo tan confuso que hasta hoy no tenemos la certeza de lo que ocurrió”, reprochó.
Los empresarios coincidieron que el año de plazo que mencionó el gobernador para mejorar la seguridad “es mucho tiempo”.
“Para nosotros un año es mucho tiempo. Estamos en quiebra ahora. Un año. Esto realmente es delicado, por eso estamos pidiéndole a nuestro gobernador que encabece esta solicitud que estamos haciendo al presidente de la República, para que sea nuestro gestor y se hagan mesas de trabajo inmediatas, y se reactive el comercio, que no se pierdan propiedades, que no se pierdan patrimonios de toda la vida”, pidió Saldívar Rodríguez.
LA VIDA NOCTURNA «ESTÁ ACABADA» POR EL TEMOR
El presidente de la Canaco-Servytur, Raúl Iracheta Montoya, indicó que la inseguridad, el comercio informal, los bloqueos carreteros y la falta de turismo, son algunos factores que se suman a la difícil situación económica de los más de 2 mil 600 agremiados.
“Es difícil tener abiertas las cortinas, pero nosotros estamos dispuestos a seguir trabajando, a seguir generando empleo con la ayuda del gobierno federal”, dijo.
Alejandro Martínez señaló que la vida nocturna en Acapulco “está acabada”, pues los negocios cierran a las 8 de la noche porque los trabajadores tienen miedo de regresar a sus casas.
“No podemos obligarlos a que ellos se presenten a trabajar, cuando ellos viven en colonias donde se presentan los problemas. Es un terror que existe en la población día con día. Salimos a trabajar pero ya es insostenible la situación, no tienen garantías, pero no se las podemos dar nosotros porque el gobierno, no nos las da a nosotros. El daño irá permeando a otros sectores. Nos hablan los secretarios de los sindicatos porque las bancas las tienen llenas pero en esta situación es imposible”, advirtió el empresario.
PIDEN PLAN PARA CONTROL DE CRISIS
Otra petición que hicieron fue la instauración de una oficina de control de crisis, que conozca los mecanismos para enfrentar cualquier tipo de contingencia negativa que sucediera tanto en el puerto como en el estado.
Pidieron mesas de trabajo con integrantes de la SHCP, IMSS, Infonavit, CFE, CAPAMA, Zofemat y todas aquellas dependencias que representan un gasto fijo para el sector empresarial.
Al gobierno federal le pidieron la conformación de un plan de contingencia especial para el momento que se vive en Acapulco y que responda a la problemática que enfrenta el sector empresarial ante la inseguridad.
Los empresarios destacaron que aún persiste la contracción económica y la falta de liquidez que afecta directamente a los comerciantes, pues argumentaron que con un día de ventas se ven impedidos para pagar los gastos diarios, las nóminas y los impuestos.
“Muchos compañeros nos veremos en la necesidad de cerrar nuestros negocios por no tener liquidez. Es muy grave la situación, es insostenible tener una cortina abierta. Amenazas del crimen organizado, extorsiones, pero también todo lo que generan estos enfrentamientos, estas balaceras”, destacó Martínez Sidney.
Pidieron el paso libre por la Autopista del Sol, descuentos en impuestos, así como pagar la mitad de las tarifas de luz durante el año que pide el gobernador como plazo para mejorar la seguridad.
La presidenta del Frente de Rescate del Acapulco Tradicional (FRAT), Dulce María Gómez Velasco, criticó el plazo que pidió el gobernador de un año para ver resultados en materia de seguridad, y exigió que los descuentos en impuestos locales se mantengan.
La representante de los prestadores de servicios náuticos, Carolina Ramos Lázaro, pidió “rediseñar políticas y estrategias emergentes para poder sobrevivir el año de plazo, de lo contrario los negocios cerrarán. La delincuencia nos está buscando, el gobernador debe tomar de la mano a la sociedad civil organizada”.
En la conferencia también estuvieron el representante de la Canaco en la Costa Grande, Adrián Abad Vargas; el presidente de los Restauranteros Unidos de Acapulco (RUA), Javier Reinada Carbajal, y una treintena de empresarios y socios de la Canaco.
ACAPULCO NO VA A AGUANTAR UN AÑO MÁS, ALERTAN
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Andrés Orozco Pintos, dijo que 720 empresas afiliadas a esa organización podrían quebrar en un lapso de un año si las condiciones de seguridad no mejoran.
Explicó que apenas un 10 por ciento de sus más de 800 afiliados se desempeñan en actividades industriales y tienen clientes fuera de la entidad, por lo que no está en riesgo su producción, aunque sí su personal pues están en Guerrero. Sin embargo reconoció que los comercios, la gran mayoría de sus afiliados, sí son afectados porque se mantienen de lo que los locales y los turistas consumen.
“Acapulco no va a aguantar un año más, los comercios, las empresas, no van a resistir un año más”, advirtió.
Destacó que si en el actual gobierno estatal se llevan mil 50 homicidios dolosos, otro año representaría que habrá más de 2 mil homicidios. “Pero esas cifras no nos están contando extorsiones y otro tipo de delitos”, acotó.
Orozco Pintos explicó que las empresas que podrían soportar la situación de inseguridad, aun con una situación económica apremiante, son aquellas con la posibilidad de expandir su mercado.
“Pero todas aquellas empresas que viven de lo que llega al puerto de Acapulco, que representan el 90 por ciento de nuestros socios, están en riesgo”, señaló el representante de los industriales.
“La situación sería distinta si hubiera desarrollo industrial, pero la gran mayoría de los negocios dependen de que al abrir sus cortinas, un turista o un local adquieran sus productos, pero eso no se está generando y lamentablemente hay una estrangulación de la economía”, declaró.
“El Gobernador tiene razón en pedir un año porque no se puede resolver el problema de la noche a la mañana, no es una situación que se haya generado en poco tiempo, sino que se trata de un problema de varios años. Si en un año realmente terminara esta situación sería bueno, porque ya llevamos cinco años del gobierno de (Vicente) Fox, seis años del gobierno de (Felipe) Calderón y tres y medio del gobierno de (Enrique) Peña y el problema persiste”, evaluó.
RESTAURANTEROS EXIGEN APOYOS «A LA BREVEDAD»
El representante de los Restauranteros Unidos de Acapulco (RUA), Javier Reinada Carbajal, pidió la implementación de programas que les ayuden a mantener sus negocios abiertos, así como las fuentes de empleo.
“Hay compañeros que cierran a las 6 de la tarde. Más temprano por la misma situación”, declaró.
Comentó que el jueves pasado fueron cancelados espectáculos en las pozolerías y los alimentos fueron repartidos entre el Ejército de Salvación y entre los trabajadores porque no hubo clientes.
“La situación de la que se quejan los compañeros es que no hay para pagar Zona Federal, agua, luz, y con toda esta situación de inseguridad desde la balacera (del 24 de abril) todo se complicó. Queremos que este apoyo no llegue en un año, sino a la brevedad para reactivar nuestros negocios. Lo que les pedimos es que nos faciliten préstamos sin intereses para poder reactivar los negocios”, declaró Javier Reinada.
Respecto al año de plazo que pidió el Gobernador para tener una mejoría en la seguridad comentó: “si nos están embargando porque no pagamos, no vamos a resistir un año y vamos a cerrar. Queremos el apoyo a la brevedad posible para que esto se reactive”.
LLEVAMOS 10 AÑOS RESISTIENDO: HOTELEROS
El presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), Jorge Laurel González, señaló que los empresarios llevan 10 años resistiendo y añadió que es “difícil” pronosticar que la solución llegará en un año.
“Llevamos 10 años con el mismo problema (de inseguridad) y la situación no mejora; sin embargo estamos en la postura de cerrar filas con las autoridades municipales, federales, estatales, la iniciativa privada y el sector social de Acapulco para que la situación cambie”, declaró a reporteros.
Reiteró que con el anuncio que hizo el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se tienen 30 operativos de seguridad anunciados y la del lunes pasado fue la sexta visita del funcionario a la entidad para hablar sobre seguridad. “La última fue la sexta y hasta el momento no ha pasado nada”, reprochó Laurel González.
La situación, sostuvo, es complicada, pero existe la confianza en que las cosas pueden y deben cambiar.
Señaló que ante la inseguridad en el puerto, la realización de la 42 edición del Tianguis Turístico representa un reto para Acapulco, para las autoridades, para el sector turístico y para la sociedad. Por lo que representaría una muestra de que habría un nuevo rostro del puerto.
SE NECESITAN SOLUCIONES A CORTO PLAZO: COPARMEX
El presidente de la Confederación Patronal de México (Coparmex) en Acapulco, Fidel Serrato Valdés, reiteró que la situación de inseguridad es complicada.
Insistió en que la solución se debe dar “a corto plazo”.
“Es lo que hemos estado pidiendo de manera reiterada y constante a los tres niveles de gobierno. Entendemos que no es una situación fácil porque no sólo es Guerrero sino todo el país, pero independientemente de que las autoridades hagan su trabajo, nosotros buscamos cofinanciamientos y una buena productividad de nuestras empresas. Nosotros no estamos abocados a lo que el gobierno haga o diga, nosotros buscamos mejorar la productividad a través de créditos y otras herramientas a las que tenemos acceso”, indicó Serrato Valdés.
Destacó que los años vividos en inseguridad “han sido difíciles y muy complicados”, pero aplaudió las “buenas” temporadas vacacionales.
“Hay problemas que sí tiene que atender la autoridad, y nosotros ofrecer mejores servicios, atender bien a los turistas y todo lo que corresponda a nosotros como empresarios”, declaró.
Adelantó que sostendrá una reunión con el general Alejandro Saavedra Hernández, comandante de la Novena Región Militar y responsable de la estrategia contra la violencia, el próximo viernes y le plantearán algunos aspectos en materia de seguridad.
NO ES FÁCIL REVERTIR EN UN AÑO LO GENERADO EN MUCHOS: IGLESIAS
Integrantes del Consejo Interreligioso pidieron por las autoridades civiles, militares, policías y por la paz, en la oración interreligiosa «Por Acapulco Unidos en el amor» para transmitir esperanza, que se realizó en el salón Triángulo del Sol del Centro de Convenciones de esa ciudad.
De la petición que hizo el Gobernador Héctor Astudillo Flores de “un año más” de resistencia a los ciudadanos para enfrentar a la delincuencia organizada, los representantes de diferentes iglesias coincidieron en que no es fácil revertir lo que se generó en muchos años, y que se estará haciendo la evaluación cuando se vayan completando los tiempos.
Unas 350 personas de diferentes asociaciones religiosas que integran el Consejo Interreligioso de Guerrero asistieron a la oración en el Centro de Convenciones, actividad a la que fue invitado el Alcalde Evodio Velázquez Aguirre.
Siete representantes de las asociaciones religiosas dirigieron su mensaje a los asistentes para orar por la seguridad en el municipio. Coincidieron en sus mensajes de que sin esperanza, oración y fe no se podrá abatir la inseguridad.
El pastor Daniel Vinalay Aguilar, de Mundo de Fe, expuso que criticar a los gobernantes no es hacer acciones de gracia, por lo que convocó a que en lugar de agredirlos se ruegue por las autoridades. “Bendice a nuestro presidente municipal, a nuestras autoridades, a los policías ministeriales, al Ejército, la Marina, a todos los que están para cuidar Acapulco”, pidió el pastor. Agregó que se quiere paz para Guerrero, Acapulco y todas sus comunidades.
De la Iglesia Nacional Presbiteriana de México, Alberto Romero Brito llamó a Acapulco a levantarse en el nombre de Cristo de Nazareth, “hacemos el llamado a que levantemos la voz, las manos, los ojos y pidamos por la paz, tenemos la necesidad de levantarnos juntos”.
El Arzsobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, dijo que todos están llamados a buscar la unidad y la construcción de la paz, “todos estamos de luto por las víctimas de la inseguridad y la violencia”, y convocó a detener “el espiral de odio y venganza que se vive”.
Añadió que el cese de la violencia es en el camino de la paz y la justicia, “pedimos que las personas de buena voluntad asuman sus responsabilidades” y también por las autoridades civiles del estado y municipio “para que se esfuercen” y busquen educar a los jóvenes en la paz, con los valores fundamentales.
De la Iglesia de Dios Vivo, Francisco Limón Cervantes aseguró que se tiene una ciudad que necesita redimirse, “la paz es necesaria en los entornos sociales y políticos”.
De las Comunidades Cristianas de México, Benjamín Fuente convocó a todos a buscar de corazón la seguridad y pidió bendecir a “nuestras autoridades”.
Al terminar la oración, el Alcalde Evodio Velázquez dijo que como ciudadano de fe y presidente municipal “gracias a Dios” tiene la fortuna y privilegio de estar el frente de esa ciudad “hermosa”. Y dijo que necesita que se unan en el esfuerzo y voluntad en la petición para cambiar las cosas en Acapulco.
Después, en conferencia de prensa, los representantes de las diferentes asociaciones religiosas agradecieron a los que participaron en la actividad, y convocaron a seguir en el esfuerzo y cada uno desde su fe aportar lo mejor de sí mismos para contribuir a generar la ciudad, el estado y país que se necesita.
“Históricamente aquí hay un gran esfuerzo del que se puede hacer, hoy hay que unir al pueblo de Acapulco… para que podamos recuperarlo”.
Los integrantes del Consejo indicaron que no se tiene un calendario de encuentros, pero que ya se acordó que la próxima reunión para orar por la paz será el 1 de junio, aún sin determinar el lugar. Y que la iniciativa es porque ellos han palpado directa e indirectamente los problemas de la sociedad y consideraron importante hacer un esfuerzo en conjunto por la paz.
Consultados respecto a la petición de un año que hizo el Gobernador Héctor Astudillo para enfrentar la delincuencia organizada, Francisco Limón expuso que el trabajo es de cada integrante de la sociedad.
Indicó que no existiera el problema si no hubiera consumidores, y que se tiene que trabajar en los entornos familiar y educativo porque no es sencillo revertir lo que se generó en años.
Por su parte, el Arzobispo Carlos Garfias dijo que el Gobernador está en el camino y en el empeño de eliminar la inseguridad y generar confianza, que el tiempo que pidió es para ir logrando y avanzando en los esfuerzos que hacen las autoridades.