La suspensión del Gran Premio de Rusia de la Fórmula 1, el cambio de sede para la final de la Champions League y el veto a la selección nacional de futbol para participar en el próximo mundial de futbol de Qatar 2022 son algunas de las suspensiones en contra del deporte ruso. La marginación de Rusia del escenario deportivo internacional implica un duro golpe financiero que se traducirá en pérdidas por varios miles de millones dólares.
-Con información de EFE y AP
Ciudad de México, 5 de marzo (SinEmbargo).- La invasión de las fuerzas militares rusas a territorio ucraniano ha generado una serie de fuertes sanciones económicas para el Gobierno de Vladimir Putin. Además de estas medidas y la condena mundial, el deporte ruso se ha convertido en objetivo de distintas penalizaciones que abarcan desde la cancelación de eventos hasta la exclusión de atletas y equipos de competencias internacionales.
La primera medida deportiva en contra de Rusia llegó tan solo un día después de que las tropas de este país comenzaron sus acciones militares en Ucrania. El 25 de febrero, la UEFA, organismo rector del futbol europeo, anunció que la final de la Champions League, programada para jugarse este año en la ciudad de San Petesburgo sería trasladada al estadio de Saint-Denis en París el próximo 28 de mayo a consecuencia del conflicto armado.
De acuerdo con la agencia EFE, el cambio de sede supone un impacto de entre 60 y 70 millones de euros en la ciudad, una cantidad importante que se perderá por no albergar el partido más importante del año a nivel de clubes en el mundo.
El Comité Ejecutivo de la UEFA comunicó esta medida después de condenar enérgicamente la acción del ejército de ruso. Además, informó que los clubes y las selecciones nacionales rusas y ucranianas que compiten en competiciones de la UEFA deberán jugar sus partidos en casa en sedes neutrales hasta nuevo aviso.
San Petersburgo perdió la oportunidad de acoger la primera final de la Champions tras la pandemia. El partido por el título de Madrid 2019, el último juego definitorio que se disputó en situación de normalidad, generó un impacto económico en la ciudad de 63 millones de euros, según confirmó a EFE Miguel Garrido, presidente de la patronal madrileña de empresarios CEIM.
Dos días después del anuncio de la UEFA, el 27 de febrero, el Bureau del Consejo de la FIFA anunció “las primeras medidas con respecto a la guerra en Ucrania” contra Rusia, entre las que destacaban el suspender todo tipo de competición internacional en el país, el veto a su bandera, himno y su selección al indicar que sólo podrá jugar con el nombre “Unión de Fútbol de Rusia (RFU)”.
“Ante todo, la FIFA desea reiterar su condena al uso de la fuerza por parte de Rusia en su invasión de Ucrania. La violencia nunca es una solución y la FIFA expresa su más profunda solidaridad con todas las personas afectadas por lo que está sucediendo en Ucrania”, señaló el organismo rector del futbol en un comunicado.
La FIFA, además, hizo un llamado para restablecer la paz en el mundo e indicó que se mantiene en contacto permanente para apoyar a los futbolistas que deseen abandonar el país.
“La FIFA hace un nuevo llamamiento para que se restablezca urgentemente la paz y para que se inicie inmediatamente un diálogo constructivo. La FIFA se mantiene en estrecho contacto con la Asociación de Futbol de Ucrania y con los miembros de la comunidad futbolística ucraniana que han solicitado apoyo para abandonar el país mientras persista el actual conflicto”.
UN GOLPE ECONÓMICO A RUSIA
Finalmente, un día después, la FIFA y la UEFA acordaron suspender a las selecciones nacionales y clubes de futbol de Rusia de toda competición internacional, incluyendo la próxima Copa del Mundo de Qatar 2022.
Los entes rectores del futbol anunciaron la decisión el lunes, indicando que el castigo se mantendrá “hasta nuevo aviso”.
La selección masculina tenía previsto disputar un repechaje mundialista en marzo ante la selección de Polonia.
“El mundo del futbol está totalmente unido y se solidariza con el pueblo ucraniano”, dijeron dijeron la FIFA y la UEFA en un comunicado conjunto.
Aunado a esto, el Comité Olímpico Internacional (COI) exhortó a los organismos deportivos a excluir a los deportistas y dirigentes rusos de todo evento internacional.
El COI dijo que esto era necesario para “proteger la integridad de las competencias deportivas mundiales y la seguridad de todos los participantes”.
Las decisión de la FIFA y la UEFA de suspender a todos los equipos de futbol ruso de sus competiciones provocará pérdidas por varios miles de millones de dólares.
De acuerdo con Bloomberg, el Spartak de Moscú, club que fue apartado de la UEFA Europa League, recibió al menos 8 millones de dólares por su participación en el torneo, 4.06 millones por quedar entre los 32 clasificados, 705 mil dólares por victoria y 235 mil dólares por empate.
Al ganar tres partidos y empatar uno en la fase de grupos el cuadro ruso recibió 6.42 millones, pero esta cifra aumentó gracias a que terminó en primer lugar de sus sector y por llegar a los octavos de final, lo que le significaron ganancias por 1.23 millones y 1.3 millones respectivamente.
Con la suspensión, el equipo ruso perderá la posibilidad de seguir aumentando sus ganancias. De haber vencido al Leipzig en los cuartos de final, hubiera recibido 2 millones. Además, en caso de avanzar a la semifinales y resultar ganador habría recibido 3.1 millones más. Es decir, más de 14 millones de dólares en total, indicó Bloomberg.
“El Spartak tiene millones de seguidores no solo en Rusia, sino en todo el mundo. Nuestros éxitos y fracasos unen a personas de decenas de países diferentes e incluso en los momentos más difíciles del deporte, desde el punto de vista del club, debe construir puentes, no quemarlos”, indicó el club en redes sociales tras darse a conocer la decisión de la UEFA.
Además de la eliminación del Spartak de Moscú y el cambio de sede de la final de la Champions League, se suma la suspensión de la selección nacional rusa del mundial de Qatar 2022 que se celebrará a cabo a finales de este año.
De acuerdo con la FIFA, el máximo torneo de selecciones cuenta con un presupuesto de mil 696 millones de dólares, de los cuales 440 millones serían repartidos entre los 32 equipos clasificados.
Bloomberg refiere a su vez que en Copas del mundo anteriores cada uno de los equipos recibió un mínimo de 8 millones de dólares en premios y 1.5 millones para “cubrir los gastos de preparación”, lo que significa un ingreso garantizado de 9.5 millones de dólares solo por participar.
El gigante alemán Adidas interrumpió, además, con efectos inmediatos su colaboración con la Federación Rusa de Fútbol. Según el reporte oficial de la compañía, en 2020, reportó ingresos por 653 millones de dólares en la región de Rusia/Comunidad de Estados Independientes en 2020, lo que equivale a un 3 por ciento de sus ganancias.
LA F1 Y SU DILEMA CON RUSIA
La Fórmula Uno anunció también el pasado 25 de febrero la cancelación del Gran Premio de Rusia, que se iba a disputar en el circuito de Sochi en septiembre, debido a la invasión rusa de Ucrania.
“La Fórmula Uno visita todos los países alrededor del mundo con la visión positiva de unir a la gente y de juntar naciones. Estamos viendo cómo se desarrolla la situación en Ucrania con tristeza e impactados. Esperamos un cambio y una resolución pacífica”, dijo la FIA en un comunicado.
A statement on the Russian Grand Prix pic.twitter.com/OZbbu9Z8ip
— Formula 1 (@F1) February 25, 2022
Días después del anuncio, la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) realizó una reunión extraodinaria para decidir si excluía o no de sus competiciones a los pilotos y equipos rusos en específico al piloto de Haas, Nikita Mazepin y a su padre, Dmitry Mazepin, amigo personal del Presidente Vladimir Putin y patrocinador principal de la escudería por mediación de su empresa, Uralkali.
Finalmente, la FIA anunció este martes que permitirá que los pilotos rusos y bielorrusos puedan seguir compitiendo en carreras, mientras no usen banderas ni símbolos de sus países.
Quienes sí quedan excluidos de las competiciones de la FIA son los equipos rusos y bielorrusos, así como han sido suspendidas «hasta nuevo aviso» las carreras que fueran a tener lugar en estos países.
«Condenamos la invasión rusa de Ucrania y nuestros pensamientos están con todos aquellos que están sufriendo», dijo Mohamed Ben Sulayem, Presidente de la FIA en un comunicado.
De acuerdo con diversos medios especializados, organizar un Gran Premio de la Fórmula 1 cuesta alrededor de 50 millones de dólares y genera ganancias de hasta el 600 por ciento.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Turismo, en el caso de México, la última edición del GP generó 14 mil millones de pesos, lo que equivale a 696 millones de dólares.
GAZPROM PIERDE PATROCINIOS
El conflicto armado incidió también en el consorcio estatal ruso Gazprom y a sus contratos de patrocinio en el ámbito deportivo.
El Schalke 04, club alemán que actualmente se desempeña en la segunda categoría del fútbol teutón, rescindió su contrato con la empresa energética.
El contrato con Gazprom era válido hasta 2025 y le garantizaba al Schalke 9 millones de euros al año. En el caso de un ascenso a la primera categoría Gazprom hubiera pasado a pagar 15 millones de euros anuales.
El club, cuyas relaciones con la firma rusa habían sido objeto de crítica entre sus aficionados, ha asegurado que su «viabilidad financiera no se pone en peligro por esta decisión» y que pronto presentará un nuevo patrocinador.
Además de perder sus acuerdos de patrocinios con clubes como el Shalke 04, Gazprom también se quedó sin su relación comercial con la UEFA.
El organismo rector del futbol europeo rompió relaciones con el gigante ruso, uno de los patrocinadores oficiales de la Champions League, el cual aportaba más de 55.9 millones de dólares, KPMG football.
ABRAMOVICH VENDE AL CHELSEA
Ante la amenaza de sanciones financieras, el dueño ruso de Chelsea Roman Abramovich confirmó el miércoles 2 de marzo que busca vender al club de la Liga Premier que transformó en una maquinaria de ganar títulos gracias a su abundante inyección de fondos.
Abramovich había quedado en la mira de políticos británicos que exigen que sea incluido en una lista de acaudalados e influyentes rusos sancionados.
Roman Abramovich confirmó el pasado miércoles que el club inglés está en venta y que no pedirá que se le pague ninguno de los préstamos que ha hecho al equipo en los últimos años.
«Me gustaría responder a la especulación que ha habido en los medios de comunicación en los últimos días respecto al Chelsea. Como he dicho en otras ocasiones, siempre tomo las decisiones en el mejor interés del club y, en la situación actual, la mejor decisión es vender el club», dijo Abramovich en un comunicado.
Abramovich aseguró que la venta del club no será inmediata sino que seguirá un proceso y que no pedirá que los préstamos que ha hecho al equipo, y que ascienden a más de mil 500 millones de libras se le paguen.
«Esto nunca ha ido de negocios o de dinero, sino de amor y pasión por el deporte y por el club. He pedido a mi equipo que abra una obra benéfica y que todos los beneficios de la venta irán destinados a las víctimas de la guerra en Ucrania. Esto incluye tanto proveer de fondos urgentes en estos momentos como a aquellas víctimas que necesiten recuperación a largo plazo», añadió el magnate ruso.
«Ha sido una decisión muy difícil de tomar y me duele mucho tener que dejar el club. Espero poder volver una última vez a Stamford Bridge para poder deciros adiós a todos. Ha sido un privilegio formar parte del Chelsea y estoy muy orgullosos de todo lo que hemos logrado».
De acuerdo con EFE, Abramovich compró el Chelsea en 2003 por una cantidad cercana a los 100 millones de euros y desde entonces lo ha convertido en uno de los equipos punteros de Europa, con 18 títulos desde entonces, incluyendo dos Copa de Europa.
EL BOXEO SE UNE A SANCIONES
Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), anunció el pasado 1 de marzo que su organismo no avalará peleas con boxeadores rusos o bielorrusos por el conflicto que existe entre Rusia y Ucrania.
“Hemos decidido que no sancionaremos funciones con boxeadores rusos y bielorrusos. Es una decisión terrible, pero necesaria para demostrar que el mundo del deporte, del boxeo y que todos queremos la paz”, dijo en conferencia de prensa.
En entrevista con EFE, el presidente del Consejo Mundial de Boxeo explicó que esta determinación se mantendrá hasta que haya un alto al conflicto bélico en el que Rusia es apoyada por Bielorrusia contra Ucrania.
“Inicialmente no sancionaríamos peleas en Rusia, pero viendo la gravedad de la situación decidimos no sancionar peleas que involucren a boxeadores rusos y bielorrusos hasta que haya un avance definitivo hacia la paz”.
El presidente del organismo destacó que la determinación de no avalar contiendas en las que aparezcan pugilistas rusos y bielorrusos también la adoptarán la Organización Mundial y la Federación Internacional de Boxeo.
“Me da gusto tener un frente común con los organismos de la Organización y la Federación para demostrarle al mundo que estos conflictos se deben resolver en un escritorio y no de la manera en que se está haciendo”, subrayó.
Sulaimán no quiso opinar sobre la pelea programada para el 7 de mayo entre el ruso Dmitry Bivol, campeón semipesado de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y el monarca absoluto de los supermedianos Saúl «Canelo» Álvarez.
“Prefiero no opinar en este momento sobre esa pelea, en este momento lo que importa es esta unión entre los distintos organismos que se han sumado para buscar la paz”, dijo respecto a la contienda que sancionará la AMB.
El combate entre Bivol y «El Canelo» aún no cuenta con una sede para su realización.
Con el paso de los días, otros deportes han seguido el ejemplo de la F1, la FIFA y el COI y aplicaron una serie de restricciones contra Rusia. La Federación Internacional de Bádminton (BWF) anunció la cancelación de todos los torneos previstos en Rusia y Bielorrusia; World Taekwondo, la federación internacional de este deporte, retiró a Vladimir Putn el cinturón negro honorífico de 9º dan; y la Confederación Olímpica del Deporte Alemán (DOSB) pidió la expulsión de Rusia y Bielorrusia de todas las competiciones europeas.
Son sólo algunos ejemplos de los que seguro que aún quedan por llegar. La lista de deportes que vetarán a Rusia, probablemente será más larga.