El Consejero independiente de la CFE y aspirante a gobernar Oaxaca, Héctor Sánchez, plantea la necesidad de reactivar el parque eólico «obsoleto» del Estado e instalar otro para abastecer a los oaxaqueños.
Ciudad de México, 4 diciembre (SinEmbargo).–En Oaxaca, la entidad con más casas sin electricidad, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) tiene un parque eólico abandonado mientras los privados operan más de 20 para venderle o abastecer a socios.
Es por ello que el Consejero independiente de la CFE, Héctor Sánchez López, originario del Istmo de Tehuantepec y quien ha vuelto a levantar la mano para contender por Morena por la gubernatura del estado este 2022 , plantea coordinar dos plantas de aerogeneradoras estatales de la mano de la empresa federal y obligar a las compañías particulares a pagar los impuestos.
Una parte de la electricidad generada por los parques eólicos de Renovalia, Grupo México o Mitsubishi asentados en esa región ventosa va para el autoabastecimiento de sus socios como Bimbo y FEMSA. Otras, como Iberdrola, le venden a la CFE.
Sánchez López –quien buscó ser Gobernador en 1998 por el Sol Azteca– ve la urgencia de construir un parque eólico estatal para los consumidores oaxaqueños y, además, modernizar el de la CFE «La Venta» I y II, inaugurado en 1994-2007 y ahora «obsoleto» con baja producción.
«Oaxaca es el estado que tiene el mayor número de viviendas sin electricidad. Si llego a la gubernatura en 2022, tendremos que generar un parque eólico para llevarle luz a los alumbrados públicos del estado de Oaxaca, que es una carga tremenda para los municipios. Necesitamos subsidiar también las bombas de agua potable», planteó vía telefónica.
«La Reforma Eléctrica –agregó– nos ayudará para que se tome en cuenta a los pueblos [zapotecas] como sus socios integrados al desarrollo. Que la riqueza se reparta equitativamente como lo dice el Convenio 169 de la OIT, no sólo que renten su tierra sin salir de la situación de pobreza».
El Consejero independiente Sánchez López aseguró que la operación de los privados en la región genera más «descontento» que beneficio para la población porque ni siquiera cumplen con sus obligaciones fiscales, por lo que cuando sea Gobernador los obligará a pagar impuestos a los municipios del Istmo.
«Estas empresas eólicas no están generando recursos para apoyar a los ayuntamientos. Dicen que tienen programas sociales para apoyar a la gente. Dan lo que quieren como botes de pintura a escuelas, regalan balones para apoyar el deporte, y un libro para apoyar la cultura. No, las empresas tienen obligaciones fiscales que tienen que cumplir y las han eludido desde que están ahí. Además, los tratos con los dueños de las tierras es con una actitud despótica, como si vinieran de nuevo a conquistar el Istmo de Tehuantepec», aseveró.
Dentro del Plan de Negocios de la CFE, dijo, está la reactivación del parque eólico en Juchitán, «La Venta I» (1994) y «La Venta II» (2007), el cual fue un proyecto piloto de la empresa estatal, pero que, a pesar de gastar en la renta de tierras de 100 campesinos, está abandono. Actualmente no todos sus 98 generadores operan por falta de mantenimiento y abastece sólo a un equivalente de 80 mil hogares.
«La CFE fue pionera en la producción eólica en la región; tenemos que reactivarlo, meter generadores de 3 megas cuando menos (ahorita son de 0.5 megas)», reconoció. «Puede haber un proyecto entre la CFE y el Gobierno estatal».
PARALIZADO EL CORREDOR TRANSÍSTIMICO
El aspirante a la gubernatura de Oaxaca también enfatizó la importancia de allanar el camino para desparalizar la construcción del Corredor del Istmo de Tehuantepec, un megaproyecto que planea la instalación de diez parques industriales en Oaxaca y Veracruz con polígonos de desarrollo, y la modernización y ampliación tanto de los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos como de las vías del Tren para el movimiento interoceánico de mercancías a mercados domésticos y mundiales.
«Es un proyecto que tendrá un impacto económico a nivel nacional, no solo en Oaxaca y Veracruz. Pero como las comunidades rezagadas han sido burladas y engañadas en sus derechos por sus tierras y propiedades en años anteriores, obviamente hay una reacción en contra», aseguró el aspirante por Morena a la guberantura.
En Matías Romero, donde hay vías viejas del antiguo ferrocarril del Istmo, a falta de una consulta indígena y dudas por un posible impacto ambiental, ejidatarios han bloqueado las obras de modernización. Los opositores expulsaron hace unos meses a los trabajadores de empresas que rehabilitan el tramo que va de Jesús Carranza, en Veracruz, al ejido Mogoñé, en Oaxaca.
El tramo suspendido entonces por los ejidatarios comprometía las obras de modernización donde laboran empresas mexicanas y españolas, entre ellas, Grupo Hermes (La Peninsular), propiedad de Carlos Hank Rhon, hijo de uno de los líderes del Grupo Atlacomulco, Carlos Hank González.
«Cuando pasó la CFE con sus torres de transmisión y Pemex con sus gasoductos, no se pagó a la gente ni se indemnizó por el uso de sus tierras que ya no pueden trabajar. Ahora que van a enderezar las vías férreas, tampoco quieren llegar a acuerdos. Falta mucho un diálogo abierto, transparente, que se sepa qué están exigiendo y haya soluciones», afirmó el Consejero independiente de la CFE. «La gente está en la mejor disposición, pero necesitan ser escuchados y canalizar soluciones».
Además, pobladores de Puente Madera, Oaxaca, promovieron un juicio de nulidad a la asamblea de comuneros en la que mediante 45 firmas falsificadas, incluyendo la de un hombre fallecido en enero de 2020, se aprobó la instalación de un polígono para los Polos de Desarrollo para el Bienestar que forman parte del proyecto federal que el fin de semana pasado fue a supervisar el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
«LA CFE SACARÁ FÓSILES»
El Consejero independiente de la CFE y aspirante a gobernar Oaxaca, Héctor Sánchez, rechazó que la Comisión sólo genere electricidad a través de fuentes sucias, como aseguran los opositores a la Reforma Eléctrica que planea discutirse en el Congreso el próximo año.
Por el contrario, dijo, tanto los privados como la estatal producen con renovables y fósiles, pero la empresa pública «está en condiciones» para la transición energética.
«Esto es un hecho. Estamos en condiciones para la transición energética. Tenemos un compromiso con el Acuerdo de París. Hay dinero ya destinado para las hidroeléctricas. Vamos ir sacando poco a poco el combustóleo como combustible de nuestras plantas”, aseveró en la entrevista respecto al plan de construir 16 hidroeléctricas y, con mil millones de pesos y la austriaca Andritz Group, modernizar otras 14. También se negocia un apoyo de la empresa pública canadiense.
Las compañías particulares generan el 7 por ciento de energía limpia (eólica y solar) que se consume en el país. En cambio, la CFE genera el 16 por ciento a través de la nucleoeléctrica, hidroeléctrica, geotermia, solar y eólicas, contrastó.
“En ningún momento vamos a tener sólo energía solar y eólica porque son intermitentes. Esto a veces genera desestabilidad en el sistema eléctrico nacional. Tendremos respaldo de las hidroeléctricas, de las termoeléctricas”, explicó.
No obstante, las hidroeléctricas no están exentas de potenciales violaciones a derechos humanos. En la Costa Chica oaxaqueña la CFE aún no ha logrado echar a andar una hidroeléctrica en el río Verde que se planeó desde finales del Gobierno de Vicente Fox Quesada.
No hay consulta indígena, sólo la petición de una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) regional e inicio de estudios. Uno de los principales opositores desde 2007, Fidel Heras Cruz, fue asesinado a inicios de este año.
La construcción del proyecto, al convertir el río en un lago artificial, afectaría por desplazamiento o inundación a 17 mil habitantes de comunidades mixteco, chatinos, afromexicanos y mestizos de seis regiones costeras, incluyendo el poblado de Fidel.
También pondría en riesgo áreas de tierras agrícolas; y la biodiversidad de fauna y flora del Parque Nacional Lagunas de Chacahua.
