Coronel fue captada por el medio estadounidense en un yate en Miami, supuestamente propiedad de Michael Blanco, el hijo menor de la narcotraficante colombiana Griselda Blanco, conocida como «La viuda negra» o la «madrina de la cocaína», con la intención de negociar sobre su posible participación en el show Cartel Crew.
Los Ángeles (EU), 4 de noviembre (EFE).– Emma Coronel, la esposa del narcotraficante mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán, mantiene conversaciones con la cadena VH1 para aparecer en uno de sus reality shows, reveló este lunes el portal TMZ.
Según el citado portal especializado en el mundo de la farándula, la mujer estaría evaluando si se vincula o no a las grabaciones de Cartel Crew, que ya en su segunda temporada ha relatado la vida en EU de los familiares de los grandes capos de la droga.
En concreto, Coronel fue captada por el medio estadounidense en un yate en Miami, supuestamente propiedad de Michael Blanco, el hijo menor de la narcotraficante colombiana Griselda Blanco, conocida como «La viuda negra» o la «madrina de la cocaína».
En varias fotografías se ve cómo el hombre y su pareja, Marie, se acercan en una lancha a la otra embarcación para sostener allí una «reunión de negocios» y convencer a Coronel de unirse al proyecto, aún cuando el Chapo cumple una cadena perpetua en EU.
Según TMZ, la aparición de la mujer puede generar varios riesgos, pues la organización que era comandada por su esposo, el Cártel de Sinaloa, sigue activa en México y no se sabe cuánto podría revelar ella durante los capítulos del show, cuyo primer episodio se emitió en enero pasado.
Coronel ha estado en el foco de los periodistas en el último año tras acompañar al «Chapo» Guzmán durante el juicio que enfrentó en Nueva York, en el que un jurado lo declaró culpable de diez delitos de narcotráfico tras casi cuatro meses de proceso.
La esposa del narco también acaparó los medios de comunicación luego de revelar varias amenazas en su contra tras la captura y liberación del hijo del capo, en otro capítulo de película, cuando el pasado 17 de octubre, soldados mexicanos retuvieron a Ovidio Guzmán en un domicilio de Culiacán, lo que desató una ola de violencia en toda la ciudad, con grupos de sicarios provocando tiroteos con armas de alto calibre e incendios.
Al verse superado por la situación, el Gobierno de México tomó la decisión de soltar al hijo del Chapo bajo el argumento de que así se podía proteger la vida de los ciudadanos de esa zona.
