Lisboa, 4 oct (EFE).- El número dos de la alianza conservadora, el democristiano Paulo Portas, se mostró aliviado por no existir en Portugal fuerzas radicales como en Grecia o España, y alertó a la izquierda lusa de que un pacto «traicionaría al electorado» porque la centroderecha venció en las legislativas.
«Los portugueses no perdonarían que su voluntad democrática fuese traicionada», dijo Portas, en alusión a un posible pacto entre el Partido Socialista (PS), que obtuvo el 32 por ciento de los votos, con el Bloque de Izquierda, tercera fuerza con un 10 por ciento de los votos, y el Partido Comunista, que obtuvo en torno al 8 por ciento.
Aunque reconoció el auge del Bloque de Izquierda (BE), un partido cercano al Podemos español y al Syriza griego, se mostró aliviado con el resultado electoral, pues, en su opinión, no sucedió «nada parecido con lo que se ha dado en España o Grecia».
«El radicalismo no sirve para liderar un país», dijo Portas, quien asumió que no tener mayoría absoluta como la de 2011 tiene implicaciones.
«Sabremos leer y respetar que no hubo mayoría absoluta», señaló el dirigente, quien abogó por una «política de apertura y compromiso».
La coalición conservadora de Portas, liderada por el actual primer ministro Pedro Passos Coelho, obtendría en torno al 39 por ciento de los votos con casi todo el escrutinio completado, lejos de la mayoría absoluta que logró en 2011. EFE