El próximo presidente de la CAF, organismo conformado por 19 países accionistas que tiene su sede en Caracas, considerado el segundo mayor banco de desarrollo de la región después del BID, necesitará al menos 10 votos y podrá optar a una reelección dentro de cinco años.
Ciudad de México, 4 de julio (EFE).- El Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) elegirá el lunes en México a su nuevo presidente ejecutivo tras la dimisión del peruano Luis Carranza, cargo disputado entre el candidato colombiano, Sergio Díaz-Granados, y el argentino, Christian Asinelli.
La elección se dará en una reunión semipresencial privada en el Palacio Nacional de la Ciudad de México, sede del Gobierno mexicano y residencia del Presidente, Andrés Manuel López Obrador, informaron este domingo a Efe fuentes del organismo.
La CAF, cuyas siglas responden a su anterior denominación como Corporación Andina de Fomento, es un organismo conformado por 19 países accionistas, con sede en Caracas y encargado de financiar proyectos de desarrollo e impulsar la integración regional de América Latina.
Los dos candidatos a la presidencia de la CAF para el período 2021-2026 son el colombiano Sergio Díaz-Granados (Santa Marta, 1968), actual director ejecutivo por Colombia ante el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y el argentino Christian Asinelli (Buenos Aires, 1975), subsecretario de Relaciones Financieras Internacionales para el Desarrollo en el Gobierno de Argentina.
El próximo presidente de la CAF, considerado el segundo mayor banco de desarrollo de la región después del BID, necesitará al menos 10 votos y podrá optar a una reelección dentro de cinco años.
Díaz-Granados, quien fuera ministro de Comercio, Industria y Turismo de Colombia entre 2010 y 2013, cuenta con el apoyo explícito de países como Brasil, Chile y Uruguay, mientras la candidatura de Asinelli tiene el respaldo de naciones como Bolivia o Portugal.
El ganador de las presidenciales peruanas, el izquierdista Pedro Castillo, ha apoyado a Asinelli, pero el retraso en su nombramiento beneficia a Díaz-Granados, respaldado por la Administración saliente de Perú.
Esta elección llega tras la dimisión el pasado marzo del entonces presidente ejecutivo, el peruano Luis Carranza, quien denunció presiones de algunos países y el «interés de politizar» las actuaciones del banco de desarrollo.
Carranza reprochó que la directiva de la CAF no respaldara el nombramiento de Bernardo Requena como presidente en Programas de Países y denunció que los directivos de Argentina le solicitaron que designara como vicepresidente a una persona, cuya identidad no reveló, que «no reunía las condiciones para el cargo».
Durante la gestión de Carranza trascendieron acusaciones de despidos masivos y de acoso laboral en su contra, como denunció Alejandra Claros, excoordinadora de Secretaría de la organización.
De nacionalidad peruana, Luis Carranza Ugarte fue elegido por amplia mayoría como presidente ejecutivo de CAF en una reunión extraordinaria de la directiva de la institución el 13 de diciembre de 2016.
Carranza fue ministro de Economía y Finanzas de Perú en dos ocasiones, además de un destacado economista que trabajó en el Fondo Monetario Internacional (FMI).